Las cifras, a julio de 2011, confirman que las sucesivas alzas de la tasa de interés por parte del Banco Central y la restricción del crédito finalmente están frenando la tórrida expansión económica del país.
Brasilia. La economía de Brasil creó menos empleos formales en julio, dijo este martes el Ministerio del Trabajo, lo que se añade a las señales de una desaceleración en la mayor economía de Latinoamérica.
Los fabricantes, agricultores y compañías de servicios agregaron un total del 140.563 empleos formales en julio, que se comparan con 234.000 en junio y con más de 225.000 mensuales en la primera mitad del año, según estadísticas del ministerio.
La cifra de julio lleva el total de empleos formales creados en el año en Brasil a 1.593.527.
En julio del 2010, la economía brasileña abrió cerca de 180.000 empleos formales.
Las cifras confirman que las sucesivas alzas de la tasa de interés por parte del Banco Central y la restricción del crédito finalmente están frenando la tórrida expansión económica del país.
Débiles datos de producción industrial y ventas minoristas conocidos en las últimas semanas han aumentado el temor a que la economía esté perdiendo impulso más rápidamente de lo esperado.
El ministro del Trabajo, Carlos Lupi, afirmó este martes que espera una recuperación en el crecimiento de los empleos formales este mes.
Lupi dijo la semana pasada que el dato de empleo formal de julio sería débil debido a factores estacionales. En esa ocasión, sostuvo que no veía una desaceleración amplia que afecte el fuerte crecimiento del empleo para el año.
El año pasado Brasil anotó cifras mínimas históricas de desempleo, dando paso a una mejora de los salarios.
Un aumento de los salarios ayudó a impulsar el consumo y el crecimiento en Brasil, lo que llevó a que la inflación se acelerara a su mayor ritmo en seis años.
El Banco Central ha elevado la tasa de interés referencial, Selic, cinco veces este año, a un 12,5% anual, para tratar de contener los precios al consumidor.
Poco más de la mitad de la fuerza laboral en Brasil está registrada en el Ministerio del Trabajo, mientras el resto de la población opera en una vasta economía informal.