La iniciativa pretende impedir engaños y conductas abusivas por parte de comerciantes, supuestas actitudes consideradas como causantes de una dura inflación que el mes pasado alcanzó un ritmo anual cercano a 55%.
Buenos Aires. El Gobierno de Argentina reforzó este lunes los controles sobre el comercio de productos como parte de un nuevo conjunto de medidas para frenar la inflación, en busca de detener el aumento del descontento con el Gobierno por la subida rampante de los precios al consumidor.
El equipo económico busca detener la aceleración del costo de vida que, combinada con una seria recesión, castiga los presupuestos de los argentinos y pone en riesgo las probabilidades de reelección del presidente Mauricio Macri en los comicios de octubre.
Pero las medidas anunciadas la semana pasada por el Gobierno de centroderecha fueron consideradas “populistas” por muchos expertos y generaron rechazo en los mercados.
“Son medidas que tienden a llevar alivio, que tienden a mejorar el poder de compra y que son complementarias y que no dañan el mediano plazo (...) que es un programa de reformas estructurales”, señaló este lunes en una conferencia de prensa el ministro de Producción, Dante Sica.
El decreto que refuerza los controles, divulgado en el Boletín Oficial, ya estaba previsto. El texto dice que apunta a “asegurar la lealtad y transparencia en las relaciones comerciales y garantizar el acceso a información esencial sobre los productos y servicios”.
La iniciativa pretende impedir engaños y conductas abusivas por parte de comerciantes, supuestas actitudes consideradas como causantes de una dura inflación que el mes pasado alcanzó un ritmo anual cercano a 55%.
La medida reglamenta la realización de inspecciones a comercios y la fijación de fuertes multas en caso de detectarse irregularidades en la comercialización de productos, entre otros controles.
Muchos empresarios son escépticos sobre la efectividad de estas iniciativas, al considerar que los comercios ya cumplen regulaciones parecidas y que la inflación es producto de motivos diferentes, ajenos a la conducta de los minoristas.
Macri tenía programado verse con hombres de negocios del sector alimentario para conversar sobre el cumplimiento de otras medidas anunciadas la semana pasada, destinadas a mantener por seis meses algunos precios de la canasta básica.
La incapacidad para enfriar la inflación impactó en la percepción sobre la gestión de Macri. Un sondeo de la consultora Isonomía reveló la semana pasada una amplia ventaja de la expresidenta Cristina Fernández sobre Macri para un eventual balotaje electoral en el que podrían enfrentarse.
Macri ha dicho que buscará la reelección, pero Fernández, quien enfrenta varias causas en la justicia por acusaciones de corrupción, todavía no se pronunció sobre una eventual participación en la votación.