Medios aseguran que miembros del Gobierno conservador consideran un segundo plebiscito si el acuerdo del "brexit" no se aprueba en el Parlamento, mientras que los llamados de los laboristas también aumentan.
Londres. La primera ministra británica, la conservadora Theresa May, reiteró este domingo su negativa a convocar un segundo referéndum del "brexit" y criticó al ex primer ministro laborista Tony Blair por apoyar esa opción.
"Tratar de minar nuestras negociaciones (con Bruselas) defendiendo un segundo referéndum es un insulto al cargo que una vez ocupó y a las personas que sirvió", afirmó May en un comunicado sobre el exmandatario, que esta semana abogó por aplazar la ruptura con la Unión Europea (UE) y celebrar otra consulta.
Miembros del Gobierno conservador consideran un segundo plebiscito. El diario The Sunday Times sostuvo que altos cargos del gabinete del Gobierno han comenzado a elaborar planes para organizar un referéndum si el acuerdo al que han llegado Londres y Bruselas no recibe la aprobación del Parlamento.
La primera ministra, que aún confía en lograr "garantías adicionales" de la UE que faciliten la ratificación del pacto, aseguró que no eludirá la "responsabilidad" de cumplir con el mandato de la consulta de 2016, en la que 51,9% de los votantes optó por abandonar la UE.
"Demasiadas personas quieren subvertir este proceso por sus propios intereses políticos, en lugar de actuar por el interés nacional", sostuvo May, que insistió en que el Parlamento "tiene el deber democrático de cumplir con aquello por lo que votaron los británicos".
Respaldar el acuerdo de May, abandonar la UE sin un pacto o permanecer en la UE. El "número dos" de la jefa de Gobierno, David Lidington, se reunió el pasado jueves con un grupo de diputados laboristas para evaluar el apoyo que existe a una nueva consulta, según revelaron medios británicos.
Según The Sunday Times, el equipo de Lidington está diseñando una estrategia para la posible consulta en la que se pediría a los británicos elegir entre dos opciones: respaldar el acuerdo de May o abandonar la UE sin un pacto.
El Parlamento, en ese caso, podría obligar al Gobierno a incluir como tercera opción permanecer en la Unión Europea, agrega el diario.
La misma fuente asevera que el exprimer ministro David Cameron ha expresado a personas de su entorno que May, aunque personalmente se opone a una consulta, seguiría ese camino si así lo pide la mayoría del Parlamento.
Presión por otro referendo aumenta dentro del laborismo. Al mismo tiempo, las bases del Partido Laborista están aumentando la presión para que su líder, Jeremy Corbyn, respalde una segunda consulta sobre el "brexit", según el diario The Guardian.
Un grupo interno del laborismo conocido como Another Europe is Possible (Otra Europa es Posible) está recogiendo firmas entre los afiliados para apoyar un plebiscito.
En el último congreso anual de la formación, el pasado septiembre, Corbyn insistió en que su principal prioridad es forzar unas elecciones anticipadas, si bien dejó abierta la puerta a pedir un nuevo voto sobre el "brexit" si esa opción no se materializa.