Las exportaciones chinas cayeron un 5,5% en agosto respecto al mismo mes del año anterior, un poco menos que un descenso de un 6,0% pronosticado en un sondeo de Reuters, y mejorando desde el declive de julio de un 8,3%.
Pekín. Las exportaciones chinas cayeron menos que lo esperado en agosto, pero un declive más pronunciado de las importaciones sugiere una debilidad económica en curso, lo que aumenta la inquietud sobre la salud de la segunda mayor economía del mundo que ha agitado a los mercados globales.
Las exportaciones chinas cayeron un 5,5% en agosto respecto al mismo mes del año anterior, un poco menos que un descenso de un 6,0% pronosticado en un sondeo de Reuters, y mejorando desde el declive de julio de un 8,3%.
Las importaciones se contrajeron por décimo mes consecutivo, cayendo un 13,8%, mucho más que la previsión de un 8,2%, tras una disminución de un 8,1% en julio, lo que refleja tanto el declive en los precios de las materias primas globales como una demanda doméstica débil.
Eso dejó al país con un superávit comercial de US$60.240 millones en el mes, dijo el martes la Administración General de Aduanas, muy por encima de una previsión de US$48.200 millones.
"No soy optimista sobre las perspectivas de las exportaciones y es poco probable que China puede lograr el objetivo de exportación para este año", dijo Nie Wen, analista de Hwabao Trust en Shanghái.
Los inversores globales estarán revisando los datos chinos de agosto que serán reportados en las próximas semanas para ver si la economía está en riesgo de un aterrizaje forzoso.
Aunque la mayoría de los economistas creen que una desaceleración gradual y prolongada es más probable, un desplome de la bolsa local y la devaluación inesperada del yuan en agosto han aumentado las preocupaciones sobre la estabilidad en China.
El 11 de agosto, el Banco Popular de China sacudió los mercados mediante la devaluación del yuan en casi un 2%.
Los economistas dicen que la devaluación podría dar un impulso leve a las exportaciones chinas con el tiempo, pero la mayoría de ellos no espera que la medida tenga un impacto en los datos de agosto.
La Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma de China (CEDR, por su sigla en inglés), la principal agencia de planificación económica de China, dijo el lunes que las exportaciones en algunos sectores habían visto una mejoría en agosto.
La CEDR también dijo que la economía cumplirá el objetivo oficial de expansión anual de un 7% cuando comiencen a sentirse los efectos de las políticas de apoyo, incluidos los canjes de deuda de los gobiernos locales, los recortes de tasas de interés y el estímulo para el mercado inmobiliario, en los próximos meses.
Funcionarios financieros chinos dijeron el fin de semana en la reunión del Grupo de las 20 principales economías que el yuan no está en camino de una devaluación a largo plazo. Pekín ha descrito la decisión adoptada en agosto como una reforma de libre mercado.
En los últimos años, la fortaleza del yuan ha golpeado a las exportaciones chinas al tiempo que ha hecho que las importaciones sean más asequible para las empresas locales y los consumidores.
Sin embargo, algunos economistas creen que las tasas de crecimiento económicas actuales ya son mucho más débiles de lo que los datos oficiales sugieren, y muchos operadores piensan que hay una presión política para permitir una depreciación más profunda del yuan en los próximos meses.