El país asiático rechazó muchas de las críticas, que incluían quejas sobre subsidios, falta de transparencia y de acciones para hacer cumplir los derechos de propiedad intelectual.
Ginebra. China rechazó las críticas de Estados Unidos durante una revisión de sus políticas comerciales en la Organización Mundial del Comercio (OMC) y aprovechó la oportunidad para insinuar que muchas de las acusaciones de Washington no sólo no tenían fundamento, sino que también eran hipócritas.
El embajador estadounidense ante la OMC, Michael Punke, expresó una amplia gama de críticas durante la Revisión de Políticas Comerciales, de dos días, a la que todos los miembros de la organización deben someterse periódicamente, y dijo que China estaba volviendo a una "adopción más férrea del capitalismo estatal".
Pero China rechazó muchas de las críticas, que incluían quejas sobre subsidios, falta de transparencia y de acciones para hacer cumplir los derechos de propiedad intelectual.
El ministro adjunto de Comercio de China, Yu Jianhua, dijo que lamentaba que durante el proceso de revisión algunos miembros de la OMC hayan afirmado que Pekín estaba ejerciendo el capitalismo estatal.
"El término no puede ser encontrado en (...) documentos de la OMC. No tiene nada que ver con la revisión o con las normas de la OMC. Creemos firmemente que la revisión no debería ser utilizada con propósitos políticos", afirmó.
Además del debate oral, China respondió más de 1.720 preguntas escritas en un documento de 442 páginas, sobre temas que van desde sus planes para desarrollar gas de esquisto a una promesa de establecer un programa de garantías de depósito lo más pronto posible.
En el documento interno de la OMC visto este jueves, algunas preguntas entregadas por Estados Unidos provocaron mordaces comentarios. Otras, como la acusación de que los organismos estatales chinos de control de la economía dan apoyo financiero a industrias claves, generaron rotundos desmentidos.
Una demanda estadounidense por más transparencia fue ignorada. China dijo que los compromisos de transparencia citados por Washington estaban fuera de la competencia de la
OMC. "Estados Unidos nunca cumple ninguno de los compromisos de transparencia hechos a China", dijo.
Interrogado sobre su aparente fracaso en otorgar mayor tiempo a otros países para comentar cambios en leyes de seguridad alimentaria, China dijo que "los problemas referidos (...) no existen. Además, China ha señalado que Estados Unidos no otorgó más tiempo (...) Esperamos que Estados Unidos pueda prestar más atención a cumplir sus propias obligaciones de transparencia".
EE.UU. "Confundido". Estados Unidos pidió a China en septiembre que aclarara unos 200 subsidios que parecían estar prohibidos por la OMC. El martes, el embajador Punke dijo que las normas de la OMC significan que Pekín tendría que haber respondido notificando con prontitud al organismo sobre los subsidios, pero que sólo lo hizo por 10.
Pero la respuesta de China a las preguntas escritas de Estados Unidos fue displicente y dijo que habían diferentes opiniones sobre lo que constituía un subsidio ilegal.
"Sobre muchos artículos en el alegato de Estados Unidos, China ya notificó en sus respuestas entregadas, pero le parece a China que Estados Unidos no ha podido reconocer las notificaciones, en particular cuando están implementadas a nivel del gobierno sub-central", manifestó.
"En cambio, Estados Unidos ha confundido esas implementaciones de nuestros gobiernos subcentrales de los programas centrales notificados como subsidios locales", añadió.
Sin embargo, China prometió acelerar sus esfuerzos para notificar a la OMC sobre subsidios locales en el futuro, habiendo concentrado sus esfuerzos hasta el momento en informar sobre sus programas centrales de subsidios, un área donde logró "avances importantes".
En respuesta a una queja de Estados Unidos sobre que los agricultores chinos tenían una injusta ventaja sobre los importadores, porque no deben pagar impuestos de valor agregado si venden directamente a los consumidores, China dijo que otros países hacían lo mismo.
Sus políticas sólo permitían exoneraciones en pequeña escala, para "agricultores que venden sus propios productos como un kilo de papas en un mercado al aire libre", y el IVA sería imposible de administrar.
Pero China prometió que más adelante este año elevará su pedido para ingresar al Acuerdo de Contrataciones Públicas de la OMC, cuyos miembros abren sus contratos estatales a las compañías de los otros países, mercados que valen cientos de miles de millones de dólares.