Ambos países, socios mayores de la unión aduanera Mercosur, mantienen un solapado conflicto comercial desde febrero, cuando el gobierno de Cristina Fernández adoptó más trabas a la importación para cuidar un menguante superávit comercial.
Buenos Aires. Argentina reclamó este viernes a Brasil por la falta de diálogo antes de imponer barreras al comercio de automóviles y dijo que su socio traba el acceso de sus mercaderías.
Brasil, que en el 2010 fue el cuarto mayor mercado global de automóviles, dijo este jueves que impondría licencias no automáticas a la importación de vehículos, estimuladas por la fortaleza de su moneda, en una medida que afecta los envíos desde Argentina, México, Japón y Estados Unidos, entre otros.
La ministra de Industria argentina, Débora Giorgi, divulgó el viernes una carta que envió a su colega de Brasil, Fernando Pimentel, en el que recordó que el comercio mutuo es crecientemente favorable a Brasil, que tuvo un superávit de US$1.200 millones en el primer cuatrimestre del 2011.
También dijo que intentó comunicarse con Pimentel y que el ministro brasileño no respondió a sus llamados.
Giorgi, un día antes, calificó la medida brasileña como "intempestiva" y dijo que afectaba el 50% del comercio bilateral, que superó los US$30.000 millones el año pasado. Argentina vendió a Brasil unos US$7.000 millones entre automóviles y piezas en el 2010.
Ambos países, socios mayores de la unión aduanera Mercosur, mantienen un solapado conflicto comercial desde febrero, cuando el gobierno de Cristina Fernández adoptó más trabas a la importación para cuidar un menguante superávit comercial.
En su carta a Pimentel, Giorgi defendió las restricciones a las importaciones.
"Las medidas que ha tomado y pudiera tomar el Gobierno Argentino, ya sea de defensa comercial, de monitoreo del comercio o de investigaciones aduaneras, se enmarcan en un todo en los acuerdos de la OMC y no tienen como destino a ningún país en particular y menos aún a Brasil, a quien consideramos un socio estratégico", expresó.
En la nota, Giorgi recordó que Argentina es el primer comprador de productos industriales brasileños y que su Gobierno busca equilibrar el comercio con Brasil.
También indicó que existen "variados problemas" de los productores argentinos para acceder al mercado de Brasil, entre los que mencionó amenazas a la exportación de aceite de oliva, costos crecientes para los exportadores de vinos, incumplimiento en un cupo para la colocación de leche en polvo, entre otros.
Además, señaló que Brasil no escucha sus pedidos para participar en obras para el Mundial de Fútbol 2014 y los Juegos Olímpicos 2016.
"Argentina viene solicitando participar en las obras públicas relacionadas con el mundial de fútbol 2014 y las olimpiadas de 2016, aún sin un resultado satisfactorio", agregó Giorgi, recordando que grandes empresas brasileñas reciben en Argentina "trato nacional pleno"