Tras anunciar un acuerdo esta semana que reducirá drásticamente la cantidad de azúcar refinada que México envía a Estados Unidos, funcionarios de los dos países están trabajando con sus sectores en una redacción final.
El secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross, impondría un nuevo acuerdo de comercio de azúcar con México, incluso si las revisiones finales no logran el apoyo de la industria estadounidense, dijeron abogados y expertos en comercio.
Tras anunciar un acuerdo esta semana que reducirá drásticamente la cantidad de azúcar refinada que México envía a Estados Unidos, funcionarios de los dos países están trabajando con sus sectores en una redacción final.
En juego está una nueva preferencia otorgada a México para satisfacer todas las necesidades de azúcar de Estados Unidos que no sean satisfechas por los proveedores nacionales u otras cuotas extranjeras.
Una coalición de productores estadounidenses de caña de azúcar y de remolacha y una importante refinería quieren garantías más explícitas de que el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, y no los productores mexicanos, decidirán qué tipo de azúcar satisface las necesidades.
Los productores están preocupados de que entre un torrente de azúcar refinada, en lugar del azúcar sin refinar necesaria para mantener funcionando los ingenios de Estados Unidos.
Este último punto de conflicto es el impedimento para resolver una disputa que se arrastra por años sobre el acceso de México al muy regulado mercado del azúcar de Estados Unidos, que está protegido por una compleja red de subsidios y cuotas para los productores extranjeros.
La industria azucarera es conocida por sus contactos en Washington, pero sus puntos de vista sobre las importaciones mexicanas no es compartido por empresas que usan el azúcar como los confiteros y los fabricantes de soda.
El Gobierno del presidente Donald Trump quiere eliminar la disputa sobre el azúcar y un conflicto comercial con Canadá antes de iniciar las importantes negociaciones para revisar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Un portavoz del Departamento de Comercio dijo que Ross esperaba que la industria azucarera estadounidense finalmente respalde el acuerdo.
Una industria rara vez se opone a una solución negociada por el Gobierno en un caso antidumping y los productores de azúcar estadounidenses tienen poco que hacer para impedir que se ejecute el acuerdo final tras de un período de comentarios de dos semanas, dijo William Perry, un abogado de Seattle que trabajó en el Departamento de Comercio y la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos.
Juan Cortina, jefe de la principal organización de azucareros de México, cree que no habrá problemas con la redacción porque cualquier necesidad extra de Estados Unidos se completará con azúcar sin refinar.