Uruguay asume este lunes la presidencia del bloque suramericano para el próximo semestre con la intención clara de promover un acuerdo con el gigante asiático, responsable del 11% del comercio mundial y enfrentado en una disputa con Estados Unidos.
Asunción. Líderes del bloque sudamericano Mercosur se reunían este lunes en Paraguay con la mirada puesta en la búsqueda de consenso para un acercamiento a China, preocupados por la demora en la conclusión del discutido pacto comercial con la Unión Europea.
Uruguay asumirá la presidencia del Mercosur para el próximo semestre con la intención clara de promover un acuerdo con el gigante asiático, responsable del 11% del comercio mundial y enfrentado en una disputa con Estados Unidos.
El relacionamiento externo del bloque fue uno de los principales tópicos en las discusiones previas al encuentro presidencial entre funcionarios de los países miembros Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay. Venezuela también es parte del Mercosur pero su membresía está suspendida.
La propuesta uruguaya tuvo el respaldo de Argentina, cuyo canciller Jorge Faurie dijo que su país está dispuesto a llevar adelante un diálogo sobre las "modalidades de entendimiento" con China. "Es una tarea que no podemos eludir", sostuvo el ministro en su intervención durante la plenaria de este domingo.
Brasil coincidió en que era un buen momento para retomar el diálogo iniciado en el 2012 y que quedó estancado.
China es un mercado clave para las exportaciones de materias primas del bloque, pero también vende productos que compiten con la producción nacional de sus países. En América del Sur, Chile y Perú son los únicos países que tienen acuerdos de comercio con China.
Paraguay, la economía más pequeña del Mercosur, ni siquiera tiene relaciones diplomáticas con Pekín porque mantiene vínculos con la isla de Taiwán, aunque el presidente electo del país Mario Abdo dijo que podría propiciar un acercamiento durante su administración que se inicia el 15 de agosto.
Los países también abogaron por retomar lo antes posible las conversaciones técnicas con la Unión Europea para la conclusión de un acuerdo comercial que lleva dos décadas negociándose. "Es una ventana de oportunidad que no se puede cerrar", dijo el ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Aloysio Nunes.
La última ronda de conversaciones finalizó con acusaciones mutuas sobre quién estaba entorpeciendo el acuerdo, mientras seguían existiendo fricciones en el tratamiento de productos industriales y agrícolas, como la carne vacuna sudamericana y los productos lácteos europeos.
El Mercosur inició además en los últimos meses negociaciones para acuerdos de comercio con Canadá y Corea del Sur y espera lanzar próximamente conversaciones con Singapur.
Los países del bloque aprobarán también una declaración sobre Venezuela y otra sobre Nicaragua, donde una ola de protestas contra el Gobierno del presidente Daniel Ortega han dejado 170 muertos los últimos dos meses.