El gobierno chino anunció que este año promoverá el ambiente para la inversión foránea flexibilizando su entrada en los sectores de la manufactura, los servicios y la minería.
México. La mayor apertura de China a las inversiones extranjeras y el comercio allana el camino para que las compañías mexicanas se dirijan hacia su creciente mercado, dijo a Xinhua el coordinador del Programa de Estudios de Asia-Pacífico (PEAP) del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), Ulises Granados.
El gobierno chino anunció el 5 de marzo que este año promoverá el ambiente para la inversión foránea flexibilizando su entrada en los sectores de la manufactura, los servicios y la minería, además de que permitirá a las empresas extranjeras involucrarse en proyectos científicos y tecnológicos.
La medida se inserta en un paquete de políticas que Beijing impulsa para lograr un crecimiento económico de alrededor del 6,5% para 2017, según señaló el primer ministro del país, Li Keqiang, al presentar el Informe sobre la Labor de Gobierno en la quinta sesión de la XII Asamblea Popular Nacional (APN, el máximo órgano legislativo de China).
Granados destacó que la apertura a la inversión extranjera directa (IED) en la industria de los servicios o la innovación tecnológica es una acción inédita, dado que el gigante asiático mantenía una lista de actividades económicas vetadas para las compañías foráneas.
"China está enviando un mensaje de que el proteccionismo no es una opción en un mundo globalizado. México y los países de América Latina deben aprovechar esta oportunidad para intentar invertir más en China", dijo el académico del ITAM.
El flujo de la IED mexicana sumó US$82.656 millones de 2010 a 2015, según cifras de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), lo que colocó a México junto con Chile como los países latinoamericanos con más inversiones en otros mercados.
Las compañías mexicanas con negocios en el exterior pertenecen en su mayoría a telecomunicaciones, química, petroquímica, panificación, cemento, bebidas y vidrio, con inversiones principalmente en Estados Unidos y Sudamérica.
El académico confió en que las medidas anunciadas por el premier chino para incentivar el comercio, la inversión, la infraestructura y el mercado interno redituarán en índices de crecimiento de la economía china en los próximos dos años por encima del 6,5 por ciento esperado para 2017.
Además de las facilidades para la inversión foránea, el gobierno chino señaló que continuará impulsando la iniciativa de la Franja y la Ruta como puente comercial con Asia, Africa y Europa, y reducirá la oferta de capacidad productiva de acero y carbón para hacer más eficientes esas industrias, y previó la creación de 11 millones de empleos.
"El gobierno chino está muy comprometido en acelerar la construcción de más infraestructura para revitalizar la economía del país", refirió.
Los esfuerzos también buscarán sacar de la pobreza a 10 millones de habitantes en las zonas rurales chinas durante este 2017.
"Estas medidas para incentivar aún más el libre comercio, la participación de la inversión, el fomento al consumo interno de China y más fondos para proyectos de infraestructura a corto y mediano plazo podrían detonar índices de crecimiento un poco más altos tal vez para el próximo año o los dos próximos años", consideró.