"Esperamos que las autoridades argentinas respeten sus acuerdos y obligaciones internacionales, en particular aquellas que resultan de un acuerdo bilateral sobre la protección de las inversiones", dijo el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, a medios.
Bruselas. Funcionarios de la Unión Europea manifestaron este martes preocupación acerca del plan de Argentina de tomar el control de la firma petrolera YPF, de manos del gigante español Repsol, pero advirtieron que las actuales normas de la UE limitaban sus posibles respuestas.
La presidenta Cristina Fernández anunció el lunes el plan de tomar control de YPF, propiedad de Repsol, lo que dio lugar a las advertencias de algunos socios comerciales clave.
"Esperamos que las autoridades argentinas respeten sus acuerdos y obligaciones internacionales, en particular aquellas que resultan de un acuerdo bilateral sobre la protección de las inversiones", dijo el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, a medios.
Su portavoz, Pia Ahrenkilde Hansen, dijo que el brazo ejecutivo de la UE tomaría dos medidas inmediatas.
Karel De Gucht, comisario de Comercio de la UE, le escribiría al ministro de Comercio argentino para "reiterar nuestros serios temores", mientras que la Comisión y la jefa de política exterior de la UE pospondrían una reunión de la comisión conjunta de la UE y Argentina, que estaba programada para el 19 y el 20 de este mes.
La Comisión analizaría las opciones disponibles, dijo Ahrenkilde Hansen durante una rueda de prensa en Bruselas.
"No creo que en este punto estemos, ni deseamos estar, en una posición para entregar detalles de tales opciones", agregó la portavoz.
Se supone que la UE tiene la responsabilidad de lidiar con disputas de inversiones bajo la nueva arquitectura que se introdujo hace dos años. Conocido como Tratado de Lisboa, el marco de trabajo se pensó para hacer que la Unión Europea fuera más eficiente y coherente.
Un funcionario de la UE dijo que, no obstante, ese nuevo rol aún no se ha traspasado a regulaciones que permitan actuar a la Comisión.
"Todavía se está desarrollando la propuesta completa", dijo John Clancy, portavoz de De Gucht.
"En este tema particular, España estará atenta a su acuerdo real de protección a inversiones bilaterales para ver cómo puede responder mejor, agregó Clancy.
España dijo el lunes que defendería sus intereses nacionales en el caso, pero que su Gobierno todavía debe decidir los modos de hacerlo.
YPF, la principal firma de energía de Argentina, se ha visto sometida a una creciente presión del Gobierno de Fernández para aumentar la producción. El precio de la acción se ha desplomado debido a los meses de especulaciones sobre una nacionalización de la empresa.
Barroso dijo que esperaba persuadir a Argentina de llegar a un acuerdo que entregue solución al problema.
"Enfatizamos la necesidad de alcanzar unas soluciones de mutuo acuerdo que no dañen el clima empresarial", dijo Barroso.