Juan Mailhos, asesor de la gremial dijo que si bien en la primera reunión tripartita se compartió el planteamiento de los lineamientos que estaban más acorde con la realidad del país y la gran heterogeneidad de las empresas, eso luego cambió.
El gerente jurídico de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios, Juan Mailhos, dijo que el sector empresarial se retiró con una "sensación de preocupación" de la última reunión del Consejo Superior Tripartito la pasada semana, donde volvieron a estar sobre la mesa los lineamientos que el gobierno fijó para encarar la próxima ronda de negociación salarial. Alertó que el aumento diferencial propuesto para los salarios sumergidos puede agravar los problemas de informalismo que hoy comprende a una cuarta parte del empleo.
En entrevista con El Observador TV, el asesor de la gremial dijo que si bien en la primera reunión tripartita se compartió el planteamiento de los lineamientos que estaban más acorde con la realidad del país y la gran heterogeneidad de las empresas, eso luego cambió.
"En la segunda reunión nos preocupó porque si bien compartimos los objetivos en las pautas de preservar los niveles de empleo y asegurar al trabajador que mantenga los niveles de salario, en el desarrollo de los lineamientos esos objetivos están amenazados de poder concretarse", advirtió Mailhos.
El gerente jurídico de la Cámara de Comercio consideró que las pautas "no se ajustan" totalmente a la coyuntura del país y la realidad de las empresas. En ese sentido, dijo que el aumento que sugirió el gobierno para el primer año de vigencia de los acuerdos "está por encima" del que los empresarios otorgaron en la ronda anterior.
"Nos parece que allí hay un desajuste para que las empresas puedan cumplir", alertó Mailhos.
Asimismo, indicó que los empresarios esperaban que la fórmula de ajuste nominal "eliminara" la indexación (ajuste por inflación pasada), algo que finalmente no ocurrió. "Son lineamientos onerosos para todos", afirmó.
Sumergidos
Los ajustes diferenciales que el Poder Ejecutivo puso sobre la mesa para los salarios más bajos tampoco convencen al empresario. En los lineamientos, el gobierno fijó un alza adicional de 3,5% anual para aquellas remuneraciones que están entre $10 mil y $12 mil mensuales y otro de 2,5% para aquellos que están entre $ 12 mil y $ 14 mil. De acuerdo a datos que brindó el Ministerio de Economía y Finanzas en la reunión del Consejo Superior Tripartito, unos 426 trabajadores se verían beneficiados con estos ajustes diferenciales.
"Esto va a implicar un ajuste muy costoso para la realidad que tienen las empresas en todo el territorio nacional cualquiera sea el tamaño", aseguró Mailhos.
Por otro lado, el representante empresarial alertó que otro efecto que puede provocar ese ajuste además de un posible aumento del desempleo es el incremento en los ratios de informalismo.
"El país mantienen hoy aún tasas de informalidad elevada. Esos niveles superan el 25% de nuestra economía. Es un tema grave y competencia desleal para las empresas", afirmó.
"La discusión es si todas las empresas puedan pagar $16 mil y puedan realizar las contribuciones a la seguridad social. Tenemos que ver de qué manera no subimos tanto la vara", sugirió.