El poder adquisitivo del promedio de los trabajadores del país registró el año pasado un leve aumento de 0,4% frente a 2014, siendo el menor impulso anual desde 2003.

Alineado al contexto de desaceleración económica y pautas de ajuste salarial más estrictas promovidas por el gobierno, el poder adquisitivo del promedio de los trabajadores uruguayos creció en 2015 a su menor ritmo de los últimos 12 años. Si bien en el grueso de los casos la capacidad de consumo siguió creciendo este año, algunos privados vieron recortado su salario real, al igual que los trabajadores públicos en su conjunto.

El poder adquisitivo del promedio de los trabajadores del país registró el año pasado un leve aumento de 0,4% frente a 2014, siendo el menor impulso anual desde 2003, de acuerdo a los datos divulgados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Eso no impidió que alcanzara un nuevo máximo desde 1976.

El desempeño del salario real en el último año marca un fuerte contraste respecto a su evolución durante la fase de mayor crecimiento de la economía uruguaya. Entre 2004 y 2014, el salario real creció a una tasa promedio de 4,1% y en el último año de ese período el aumento fue de 3,5%.

El menor ritmo de aumento del poder adquisitivo se debió tanto a un repunte de la inflación como al menor incremento de los salarios durante el último año.

Así, mientras que el ritmo de aumento de los precios se incrementó más de un punto porcentual –pasó de 8,3% en 2014 a un alza de 9,4% en el último año–, los salarios nominales pasaron de crecer a una tasa de 12%, a una de 9,9% en 2015.

El ritmo de aumento del salario real fue perdiendo dinamismo a lo largo del año. En el segundo semestre, incluso, hubo meses en los cuales el atraso en la negociación colectiva del sector privado llevó a que el poder de compra de los trabajadores se ubicara por debajo de igual período de 2014.

En el último trimestre el poder de compra de los trabajadores privados mejoró, pero no así en el sector público, donde el aumento salarial recibido a principio del año no logró cubrir el aumetno de los precios. Mientras que en 2014 los trabajadores públicos pudieron adquirir con su salario 3% más bienes y servicios que en el año previo, en el último año enfrentaron una baja de 0,2%. En tanto, el salario real del sector privado pasó de aumentar 3,8% en 2014 a 0,7% en el año.

Si se desagrega por sectores de actividad, hubo una caída del poder de compra en tres de los nueve rubros que considera el INE. Hoteles y restaurantes fue el sector que tuvo la mayor pérdida de su capacidad adquisitiva (-2,4%), seguido por los trabajos relacionados con servicios sociales y de salud, con un retroceso de 2,3%, mientras que un escalón por debajo se deterioró el poder de compra de los trabajadores de la enseñanza privada (-0,7%).

En el otro extremo, el sector de la construcción incrementó 2,9% su capacidad adquisitiva, seguido por el rubro de actividades inmobiliarias y de intermediación financiera, que pudieron adquirir en promedio 2,2% más de bienes y servicios en relación al año anterior.

Los trabajadores del rubro transporte y comunicaciones aumentaron su salario real 2%, el comercio 1,5% y la industria –uno de los sectores del mercado laboral más afectados por la desaceleración económica– tuvo un aumento de 0,7%.