"La economía global aún está enfrentando grandes incertidumbres y aún no se ha despercudido del profundo impacto de la crisis financiera", dijo Li según un reporte de Xinhua en la noche de este domingo.
Pekin. China necesita llevar a cabo reformas estructurales para estimular la demanda interna, ya que la recuperación económica global sigue siendo débil, dijo el vice primer ministro Li Keqiang, según la agencia de noticias oficial Xinhua.
"La economía global aún está enfrentando grandes incertidumbres y aún no se ha despercudido del profundo impacto de la crisis financiera", dijo Li según un reporte de Xinhua en la noche de este domingo.
La débil recuperación global podría opacar los esfuerzos de China para estimular las exportaciones, mientras se mantenga el desequilibrio de la recuperación económica mundial y el proteccionismo comercial crezca, dijo Li.
La autoridad advirtió también sobre el daño potencial que podrían ocasionar las excesivas deudas de los Gobiernos, así como las políticas monetarias expansivas en algunos países.
"Algunas de las grandes economías han implementado políticas monetarias expansivas para estimular la recuperación económica, inyectando un importante monto de liquidez que podría crear turbulencias en los mercados financieros globales y elevar los precios de las materias primas", dijo Li.
Esto podría derivar en un aumento de los flujos de capital especulativo hacia las economías de mercados emergentes, indicó.
Funcionarios chinos han arremetido contra la nueva ronda de alivio monetario en Estados Unidos, advirtiendo que el programa podría afectar a la economía global al generar burbujas de activos.
Por otra parte, el vice primer ministro dijo que el Gobierno chino seguirá impulsando la demanda interna, especialmente el consumo, como una estrategia de largo plazo para reequilibrar la economía y sostener el crecimiento.
"La transformación del modo de desarrollo económico no permite retrasos, y la clave de la transformación es realizarla de una manera acelerada y con efectos prácticos", afirmó.
En este sentido, China mantendrá una "tasa de crecimiento apropiada" para invertir y alentar el gasto privado, afirmó.
El Gobierno reducirá su intervención en la economía y permitirá que las fuerzas del mercado jueguen un papel vital en la asignación de los recursos, fortaleciendo la supervisión para evitar los riesgos financieros, agregó Li.