La tasa de participación en la fuerza laboral -el porcentaje de estadounidenses en edad para trabajar que tienen empleo o buscan uno- subió a un 63,9% desde un 63,7% en enero, mostró el viernes un reporte del Departamento del Trabajo.
Chicago/Nueva York. Al igual que muchos estadounidenses desempleados, Gint Butenas tiene un cauto optimismo sobre que las cosas podrían resultarle bien.
El trabajador de 57 años de tecnología de la información fue despedido de una fábrica de medicamentos en el 2009. En ese entonces, Butenas recuerda que la economía de Estados Unidos perdía 250.000 empleos al mes, así que consideró que tenía poco sentido el siquiera buscar un nuevo trabajo.
Después de completar un grado máster para mejorar sus habilidades en su rubro en el 2010, el ahora busca empleo y ha visto señales de mejoría.
"Me han contactado más y he tenido un par de entrevistas", dijo Butenas mientras asistía a una feria de trabajos tecnológicos en el campus satélite DePaul's en el centro de Chicago. Cincuenta empleadores, incluidos CME Group, LivingSocial y Allstate Insurance, estaban recibiendo currículum vitae.
"Pero aún estoy buscando. Por eso estoy aquí (...) A veces despierto en la mañana y no puedo creer donde me encuentro", declaró.
Datos divulgados el viernes mostraron que muchos más estadounidenses que renunciaron a buscar trabajo volvieron a la fuerza en febrero, mientras la resaca de la crisis económica del 2007 al 2009 da señales de ceder.
Por tercer mes consecutivo, la economía de Estados Unidos creó más de 200.000 empleos, aún una cantidad pequeña frente a los millones de trabajos que se perdieron desde el comienzo de la recesión.
La tasa de participación en la fuerza laboral -el porcentaje de estadounidenses en edad para trabajar que tienen empleo o buscan uno- subió a un 63,9% desde un 63,7% en enero, mostró el viernes un reporte del Departamento del Trabajo.
Aunque la tasa se mantiene en un mínimo de 29 años, registró su mayor avance mensual desde abril del 2010.
Muchos estadounidenses nunca dejaron de buscar trabajo y su perseverancia está comenzando a rendir frutos.
Julian Robinson, de 47 años, comenzó un empleo como analista financiero esta semana en un fondo de cobertura en Nueva York, dos años después de que fue despedido de otra firma en la que trabajó durante más de tres años.
A pesar de sus habilidades actuariales, la búsqueda de trabajo no fue sencilla. El tuvo entre 20 a 30 entrevistas telefónicas, pero las compañías solían rechazarlo porque estaba sobre cualificado para el cargo al que había postulado.
Finalmente, el mes pasado, le ofrecieron dos empleo.
"Creo que a veces se trata de estar en el lugar correcto, en el momento correcto", dijo Robinson.
Natalya Podgorny, de 31 años, espera tener la misma suerte.
Desde que dejó un empleo en una editorial de revistas hace cinco meses, Podgorny ha armado una red de contactos, revisado su currículum vitae una y otra vez, ha solicitado empleos a través de internet y en persona, y ha tomado clases en la Universidad de Nueva York para afinar sus habilidades.
Aunque ella estima que sólo uno de cada 15 empleadores responde alguna vez a las solicitudes, ella dice que ahora se han comenzado a abrir algunas puertas.
"Ha sido un poco desalentador, pero he tenido varios contactos personales que se me han acercado en la última semana, así que he notado un cambio", dijo Podgorny, con un montón de currículum en su mano en una feria de empleo en el Madison Square Garden de Nueva York.
"Simplemente no esperaba que fuese a tomar tanto tiempo", sostuvo. "No habría dejado mi antiguo trabajo sin un plan concreto si hubiese tenido una impresión del tiempo que iba a tomar", agregó.
Optimismo y entrevistas. El aumento de personas que buscaban trabajo el mes pasado normalmente habría elevado la tasa de desempleo, poniendo presión sobre el presidente Barack Obama mientras inicia su carrera por la reelección. En cambio, la tasa de desempleo se mantuvo estable en 8,3%, un mínimo de tres años, debido a que fue compensada por un aumento de nuevos trabajos.
El desempleo en Estados Unidos estaba en un 4,5% a mediados del 2007, antes de que saltara a un 10,1%, su mayor nivel en la crisis, en octubre del 2009.
La gente que no busca trabajo no es considerada como parte de la fuerza laboral, y había cerca de un millón de trabajadores en febrero que habían dejado pasar al menos un mes sin buscar empleo. A medida que el mercado laboral mejora, más de ellos posiblemente regresarán al mercado, lo que podría elevar la tasa de desempleo.
Holly Steel de Foxboro, Massachusetts, aún no encuentra trabajo, pero se muestra más optimista que en agosto pasado, cuando fue despedida de Sun Life Financial, donde trabajaba en comunicaciones internas.
Ella dijo que está esperando una respuesta sobre un cargo y que tenía una entrevista para otro empleo la próxima semana.
"Creo que hay mayor necesidad que antes, pero aún veo a muchas compañías que buscan personal administrativo, pero que no están dispuestas a pagar los salarios que la gente podía recibir antaño", dijo Steel.
Más compañías están golpeando las puertas de las instituciones de educación superior.
La Universidad Estatal de Pensilvania ha visto un aumento de un 6 por ciento en la cantidad de empleadores que realizan entrevistas en el campus, en comparación al año pasado. En tanto, un reporte del Collegiate Employment Research Institute en la Universidad Estatal de Michigan predijo que la contratación en campus aumentaría un 7% esta primavera boreal.
"Con la mejoría del mercado laboral, ciertamente estamos viendo un aumento en la competencia por conseguir a los mejores talentos", dijo Robyn Tyler, vicepresidente de administración de talento global en Office Depot Inc, el segundo mayor proveedor minorista de oficinas en Estados Unidos.