El índice paneuropeo FTSEurofirst 300 cerró con una caída del 0,53%, a 1.573,09 puntos.

Las acciones europeas cerraron el viernes con pérdidas, afectadas por un repunte del euro tras unos datos económicos débiles en Estados Unidos, e incluso a pesar de que los mercados de bonos se estabilizaron tras los vaivenes de los últimos días.

El índice paneuropeo FTSEurofirst 300 cerró con una caída del 0,53%, a 1.573,09 puntos. Entre las más golpeadas estuvieron las acciones alemanas -con un mayor componente exportador- después de que el euro tocó un máximo de sesión contra el dólar.

La producción industrial en Estados Unidos bajó por quinto mes consecutivo en abril, mientras que una caída de la confianza del consumidor mayor a la esperada en mayo subrayó los inconvenientes que tiene la economía estadounidense para tomar impulso tras un primer trimestre decepcionante.

Las acciones de las hidrocarburíferas Technip y Statoil bajaron alrededor de un 3%, acompañando el descenso de los precios del petróleo a menos de US$66 por barril.

Entre otros valores destacados, los títulos de Roche subieron un 1,8% tras reportar sólidos resultados de sus ensayos para un tratamiento contra el cáncer.

Varios inversores dijeron que señales de que una ola de ventas en el mercado de bonos estaba comenzando a ceder ayudó a las acciones, tras un repunte temprano del rendimiento de la deuda soberana alemana que había contribuido por segunda semana consecutiva a la salida de flujos de las bolsas europeas, de acuerdo a Bank of America Merrill Lynch.

El FTSEurofirst 300 sigue cerca de su nivel más alto en más de 14 años, y acumula una subida de alrededor de un 15% desde el comienzo de 2015.

Para los estrategas bursátiles de Citigroup, pese a las señales de burbujas que están surgiendo en los mercados financieros, es demasiado temprano para ir en contra de la tendencia alcista predominante en las bolsas.