La actividad económica en Brasil se expandió un 0,41% en julio, en la lectura ajustada por estacionalidad, una cifra que se compara con la tasa revisada al alza de 0,55% para el mes previo.

La actividad económica en Brasil creció en julio a una tasa más acelerada a la prevista, lo que sugiere que la economía tuvo un sólido comienzo del tercer trimestre, a pesar de una serie de reportes económicos dispares.

La actividad económica en Brasil se expandió un 0,41% en julio, en la lectura ajustada por estacionalidad, una cifra que se compara con la tasa revisada al alza de 0,55% para el mes previo.

Economistas consultados por Reuters esperaban un avance mensual de un 0,1%.

La sólida lectura sobre la expansión económica debería aplacar las preocupaciones en torno a un freno de la recuperación, generadas después de débiles datos sobre las ventas minoristas y la actividad del sector de servicios.

La economía más grande de América Latina está intentando dejar atrás la peor recesión de su historia, que llevó la inflación a mínimos de 18 y permitió que el Banco Central redujera las tasas de interés al mínimo desde 2013.

Los bajos incrementos de precios y de costos de endeudamiento han apuntalado el gasto de los consumidores, lo que a su vez impulsó el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) por encima de las expectativas de analistas.

Economistas esperan que los últimos datos permitan sostener el repunte de la actividad económica en el futuro, aunque las inversiones deberían recuperarse lentamente en la medida en que las empresas den prioridad a la disminución de la deuda.

El índice de actividad económica del Banco Central subió 1,48 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior, en comparación con el alza de 0,8% registrada en junio.