Desde una perspectiva anual, con respecto al mismo periodo del año anterior y al periodo inmediato anterior, el reporte de la actividad industrial a julio muestra un comportamiento débil. La evolución del sector industrial inició el segundo semestre de 2017 sin mostrar una mejora significativa respecto al bajo patrón observado en el primer semestre de 2017. El único indicador positivo podría ser el desempeño del sector minero, donde se puede notar una tendencia menos negativa que en los trimestres anteriores. Si esta evolución persiste en los próximos meses, la fuerza de la economía en su conjunto seguirá estando basada en el dinamismo del sector servicios.

 
Respecto al mismo mes del año pasado, el reporte a julio de 2017 muestra una reducción de 1,47% de la actividad industrial en su conjunto. La construcción sufrió una caída de 2,92%. Por otro lado, la manufactura (el principal componente dentro del sector industrial) avanzó 2,68%, y en el trimestre terminado en julio creció 3.03% frente al mismo trimestre de 2016.
 
En lo que se refiere al sector manufacturero, este último dato representa una desaceleración importante frente a los incrementos anuales de meses anteriores. Además, las métricas de crecimiento anual para este sector podrían sufrir mayores desaceleraciones en los próximos meses debido a la aceleración en la manufactura, que inició en el trimestre terminado en julio del año pasado. Es especialmente relevante el crecimiento trimestral anualizado frente al trimestre terminado en abril donde se observa una reducción de 0.43% en la actividad manufacturera y una caída de 2,34% para la actividad industrial en total.
 
En la Gráfica 1 se presenta la evolución trimestral de los índices (ajustados por estacionalidad) de la actividad industrial y sus componentes principales. La actividad industrial no ha mostrado ningún crecimiento por aproximadamente dos años consecutivos. En cuanto a la actividad manufactura, ha dejado de crecer desde hace aproximadamente cuatro meses. Esto, después de un periodo relevante de crecimiento a partir de julio del año pasado que duró aproximadamente nueve meses.

 
Por su parte, la construcción ha caído por aproximadamente ocho meses y no da indicios de que esta caída pueda detenerse en los próximos meses. Finalmente, la minería sigue cayendo, aunque a un ritmo menor que lo observado en meses anteriores, hasta aproximadamente febrero, debido a la estabilidad observada recientemente en el sector de petróleo y gas.