El gobernador del Banco de México reiteró que en la nación hay estabilidad financiera con crecimiento, situación que no ocurre en economías similares.

Excelsior.com.mx A pesar de los movimientos registrados en las divisas a escala mundial y en la moneda nacional, el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, aseguró que, de momento, “no tenemos nada de qué preocuparnos”.

Reiteró que “hay estabilidad financiera con crecimiento”, cosa que no ocurre en otras naciones en desarrollo, “no queremos ser complacientes”.

Recordó que la decisión del Consejo de Estabilidad Financiera se tomó la determinación de fortalecer la vigilancia sobre las variables, a efecto de procurar una mayor estabilidad financiera, objetivo central de la autoridad monetaria, añadió.

Nosotros no tenemos ninguna duda; simplemente queremos mandar un mensaje que como autoridades nos mantendremos vigilantes. Nada de qué preocuparse. Por el momento, no”, ratificó.
Entrevistado por Excélsior después de participar en la Semana de la Transparencia, organizado por el Instituto Federal de Acceso a la Información (IFAI) en la antigua sede del Senado de la República, Carstens dijo que México no ha registrado turbulencias financieras como las que viven países con economías similares.

Tasa objetivo en EU

En su 17 sesión ordinaria, los integrantes del Consejo de Estabilidad del Sistema Financiero identificaron al proceso de normalización de la política monetaria estadunidense como “fuente potencial de turbulencia en los mercados financieros”, los cuales registran una tendencia creciente de su vulnerabilidad porque el entorno de bajas tasas de interés propicia una subvaloración de los riesgos en los mercados financieros internacionales.

Así, informaron que se mantendrán atentos a preservar la fortaleza del marco macrofinanciero del país y confiaron en que las reformas estructurales permitirán a México diferenciarse “en este complejo entorno internacional”.

Interrogado sobre esta posición del Consejo, Agustín Carstens precisó que se tomó la decisión de fortalecer la vigilancia sobre las variables, a efecto de procurar una mayor estabilidad financiera, objetivo central del mismo Banco de México.

Antes de su participación en la Semana de la Transparencia, recordó que la autonomía del Banco de México se originó por “la dolorosa experiencia que dejó en varias generaciones de mexicanos la convivencia con alta inflación.

En esos periodos del siglo pasado, la elevada inflación erosionó los salarios de los trabajadores y las pensiones, acortaron sin misericordia el horizonte en el que personas y familias podían planear su futuro, impidieron la formación de patrimonios a partir del ahorro y del trabajo constantes, premiaron la especulación y el cálculo oportunista de corto plazo, al tiempo que castigaron sin remedio las inversiones de largo aliento”, dijo.
Transparencia

El gobernador del Banco de México pidió al Senado y al IFAI entender que las obligaciones de transparencia para esta institución autónoma del Estado mexicano no pueden ser las mismas que para el resto de este tipo de instituciones, pues el Banco resguarda información que de conocerse puede poner en riesgo la estabilidad del país y la seguridad de sus propios funcionarios.

El titular del Banco de México, dijo que en materia de información, sobre la elaboración de billetes y monedas “una transparencia mal entendida podría frustrar los objetivos que se buscan o incluso generar episodios de inestabilidad financiera y económica”, ante la propuesta del IFAI de que la nueva Ley de Transparencia incluya la obligación del Banco Central de hacer pública esta información.

Por su parte, el titular del Instituto Federal de Telecomunicaciones, Gabriel Contreras, dijo que la base de transparencia para los órganos autónomos debe ser pareja para todos.

En tanto, Eduardo Sojo, responsable del INEGI, anunció que el instituto se convertirá en la primera instancia de información estadística del mundo que cumplirá con los lineamientos del régimen de datos abiertos.

Me parece que todos los organismos autónomos deben hacer un compromiso para que toda la información estadística tenga estas características: que sea pública, gratuita y de libre uso”.