La nueva proyección se basa en que el ritmo de crecimiento de la actividad económica en México en el segundo semestre fue menor que lo esperado.

La Junta de Gobierno del Banco de México redujo su proyección de crecimiento de la economía del país a un nuevo rango entre 1,7% y 2,5% para este año, desde 2% y 3%.

El gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, detalló que la institución también disminuyó en 20.000 plazas, la expectativa del número de trabajadores afiliados al IMSS y ahora espera una generación entre 560 y 660 mil empleos formales.

La nueva proyección se basa en que el ritmo de crecimiento de la actividad económica en México en el segundo semestre fue menor que lo esperado, reflejo de un débil desempeño de la actividad industrial, y de un débil desempeño de los componentes de la demanda interna”, precisó durante la presentación del Informe Trimestral de abril a junio de este año.

Por otro lado, Carstens expuso que ante la inminente alza de tasas de interés y un entorno internacional más astringente, lo que Banxico recomienda es reforzar el marco macroeconómico del país.

Es muy importante que se fortalezcan estructuralmente las finanzas públicas, sobre todo a la luz de la baja en los precios y la producción del petróleo, en un entorno en donde no se prevé que haya aumentos y en este sentido es importante que se estabilice y que pueda reducirse la razón de deuda pública sobre el PIB”, enfatizó.

Lo que más van a premiar los mercados serán a aquellos países que puedan ofrecer estabilidad financiera con mayor crecimiento económico”, respondió.

Entonces independientemente qué hagan los demás países México debe buscar eso, el país necesita establecer las condiciones que aseguren la estabilidad financiera hacia adelante y que esto establezca las condiciones para que crezcamos de manera más acelerada”, reiteró.

Condiciones externas complicadas. Tenemos condiciones externas un poco más complicadas, sobre todo por la posible acción de la Reserva Federal de EU y añadiría por la caída de los precios de mercancías básicas, en el caso de México el petróleo, que podría tener un efecto sobre el tipo de cambio y ajustar la dinámica de los precios”, advirtió.

Por lo anterior, dijo que la Junta de Gobierno se mantendrá muy vigilante al comportamiento de todos los determinantes de inflación, poniendo particular atención al desempeño del tipo de cambio, la postura monetaria relativa entre México y Estados Unidos y el grado de holgura de la economía, con el fin de tomar medidas oportunas con toda flexibilidad para consolidar la convergencia de la inflación al objetivo de 3%.

Previó que la inflación general y subyacente cerrará el año por debajo de 3%; destacó que las expectativas de inflación están bien ancladas, por lo que se espera que en 2016 los precios ronden también 3%.