Pasar al contenido principal

ES / EN

Análisis: Argentina se encamina a perder vital superávit primario
Viernes, Mayo 25, 2012 - 17:48

Si el gasto gubernamental mantiene su ritmo actual a lo largo del año, el resultado fiscal primario, que no incluye los pagos de deuda, entrará en rojo en enero.

Buenos Aires. Argentina se encamina a terminar el 2012 con déficit presupuestario primario por primera vez desde que comenzó a recuperarse de su gran crisis una década atrás.

Si el gasto gubernamental mantiene su ritmo actual a lo largo del año, el resultado fiscal primario, que no incluye los pagos de deuda, entrará en rojo en enero, una amenaza para el sostenimiento de generosos subsidios y programas sociales de la presidenta Cristina Fernández.

Esto en momentos en que el crecimiento de la economía es afectado por la situación global. La alarma sonó el miércoles, cuando el Ministerio de Economía dijo que el superávit presupuestario primario de abril fue de 1.061,4 millones de pesos (US$237 millones), un 46% menos que en el mismo mes del 2011.

"A este ritmo el Gobierno mostraría déficit primario este año", dijo Boris Segura, que analiza la economía argentina para Nomura Securities en Nueva York.

Eso sería un obstáculo para Fernández, quien ganó la reelección en octubre con la promesa de profundizar el modelo político forjado por su difunto esposo y antecesor como presidente, Néstor Kirchner. Su Gobierno no ha dado señales de contener el gasto.

Bajo la administración de Kirchner, iniciada en el 2003, y luego en la de Fernández, el Estado ha endurecido su control sobre la economía.

Las altas tasas de expansión de la economía de China catapultaron las exportaciones de soja de Argentina, fortaleciendo el consumo y la producción industrial en el país sudamericano.

Argentina es el mayor exportador mundial de aceite y harina de soja.

Pero la alta demanda mundial no salvará a Argentina de un déficit primario en el 2012 si el gasto público no se modera, dijo el economista independiente Maximiliano Castillo.

"Si la dinámica del gasto no cambia, Argentina probablemente termine este año con déficit primario", dijo.

Políticas gubernamentales imprevisibles como trabas a las importaciones y un control de cambios han dañado la confianza en la tercera economía latinoamericana, que registra bajos volúmenes de inversión extranjera en relación a sus vecinos.

El presupuesto de Fernández estima un crecimiento económico del 5,1 por ciento en el 2012. La cifra es muy superior a las de Estados Unidos y Europa, pero muy alejada del crecimiento de 8,9 por ciento que registró el país en el 2011.

En tanto, la popularidad de Fernández ha caído de la mano de la desaceleración de la economía, algo que la llevó a frenar anunciados recortes de los subsidios al transporte y a la energía.

El superávit primario es un indicador seguido de cerca por el mercado financiero, ya que representa una medida de la capacidad de un país para honrar sus compromisos financieros. Argentina está fuera de los mercados globales de crédito desde el cese de pago de deudas del 2002.

Un déficit presupuestario primario probablemente extendería la golpiza que la deuda soberana del país ha estado recibiendo en los últimos meses, afectada por los frenos a la importación y los fuertes controles al mercado de cambios que han dañado la confianza.

Los ingresos estatales que dependen del crecimiento económico, como la recaudación de impuestos y las contribuciones de seguridad social, han crecido más lento que el gasto durante el último año.

El gasto de capital, que incluye el presupuesto del Gobierno en obras públicas, creció un 35 por ciento en el período entre enero y abril. El gasto en energía, transporte público y otros subsidios aumentó un 18 por ciento mientras que el gasto en pensiones y planes sociales creció un 40 por ciento, dijo Segura.

Luego del pago de la deuda, las cifras de abril mostraron un déficit de 1.860 millones de pesos, más de cuatro veces el déficit en pesos de abril del 2011, que fue de 411,8 millones de pesos.

El déficit tras el pago de la deuda alcanzó el 1,7 por ciento del PBI el año pasado. "Estoy proyectándolo al 3 por ciento del PBI este año", dijo Segura.

Fernández nacionalizó el sistema de pensiones privadas durante su primer mandato y el sector agropecuario se queja por las restricciones a las exportaciones de maíz y trigo que aseguran el abastecimiento local de alimentos a costa de las ganancias de los agricultores.

La mandataria, además, enojó a España y a otros socios comerciales este mes cuando nacionalizó un 51 por ciento de la principal petrolera argentina, YPF, que estaba en manos de la española Repsol.

"El derroche fiscal empeoró tras la reelección", dijo Gary Kleiman, de la consultora Kleiman International, basada en Washington.

"La financiación de deuda comercial voluntaria se tornará cada vez más difícil con la continua mala administración", agregó Kleiman. "Veo un déficit primario para fines de año", afirmó.

Autores

Reuters