"Por eso todas las conversaciones que estoy manteniendo están presididas por ese espíritu, que Jean-Claude Juncker debería ser el presidente de la Comisión Europea", afirmó Merkel.
Berlín. La canciller alemana, Angela Merkel, manifestó de forma expresa su apoyo al luxemburgués Jean Claude Juncker como próximo presidente de la Comisión Europea (CE), después de que el Partido Popular Europeo (PPE) fuera la fuerza más votada en las recientes elecciones a la Eurocámara.
"Por eso todas las conversaciones que estoy manteniendo están presididas por ese espíritu, que Jean-Claude Juncker debería ser el presidente de la Comisión Europea", afirmó Merkel en las jornadas anuales que la Iglesia Católica germana celebra en Ratisbona (sur de Alemania), según recogieron los medios locales.
La canciller, que participó en una mesa redonda titulada "¿Tiene el mundo todavía un lugar para Europa?", mostró su respaldo a Juncker después de recibir diversas críticas en los últimos días al dejar abierta la puerta a que pudiera ser otra persona la que liderase el Ejecutivo comunitario.
El Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) llegó a advertir a la canciller de que podría cometer "un fraude a los electores" si no apoyaba al expresidente del Eurogrupo y antiguo primer ministro luxemburgués, elegido por el PPE como candidato a la presidencia de la Comisión Europea.
Las dudas se acrecentaron el pasado martes tras la reunión de los jefes de Estado y de Gobierno de la UE en Bruselas.
En esa cita el primer ministro británico, David Cameron, se significó en contra de Juncker y otros países, como Holanda y Suecia, mostraron también reticencias.
Precisamente Merkel tiene una reunión prevista con los jefes de gobierno de estos tres países los días 9 y 10 de junio en Suecia, donde está previsto que analicen el relevo en la cúpula de la Comisión.
Nada más conocer las palabras de Merkel hoy la secretaria general del SPD, Yasmin Fahimí, se felicitó en Berlín por que la canciller hubiera "corregido el rumbo, obligada por la presión pública".
A su juicio, cualquier otro camino habría supuesto "decepcionar a los votantes" ya que el PPE fue la fuerza más votada.