Una fuerte colocación de deuda local a principios de esta semana le dio al peso un apoyo adicional, con una barrera en 25 pesos por dólar que es vista como un nivel que podría estabilizar temporalmente la moneda en ausencia de sorpresas inflacionarias.
Nueva York.- Los esfuerzos de Argentina para estabilizar el peso en 25 unidades por dólar estadounidense parecen estar funcionando, de cara a una reunión clave con el FMI para discutir un paquete de apoyo al país sudamericano, dijeron esta semana varios analistas de Wall Street.
Una fuerte colocación de deuda local a principios de esta semana le dio al peso un apoyo adicional, con una barrera en 25 pesos por dólar que es vista como un nivel que podría estabilizar temporalmente la moneda en ausencia de sorpresas inflacionarias.
"Si una tasa de 25 pesos por dólar es de equilibrio, podría seguir subiendo gradualmente con la inflación, pero lo que no puede hacer es seguir subiendo un peso o dos por día", dijo Gabriel Torres, analista senior del crédito soberano de Argentina en Moody's.
El peso perdió casi un 20% en cuestión de semanas.
"Cuando tienes una corrida (contra una moneda) normalmente buscas que el gobierno tenga un objetivo creíble en el que quiere que termine y los recursos para respaldarlo", dijo Torres.
Los operadores dijeron el jueves que el banco central ofreció vender hasta US$5.000 millones a 25 pesos en el mercado contado, luego de permitir que el peso flotara libremente el miércoles. La moneda estuvo recientemente en 24,30 pesos por dólar.
"No hay duda de que han trazado una límite en los 25 (pesos por dólar) y van a defenderlo", dijo Ilya Gofshteyn, estratega macro de Standard Chartered Bank en Nueva York.
El presidente Mauricio Macri había dicho el miércoles que la corrida contra el peso había terminado.
Buscando un soporte. El equipo económico de Macri está luchando por recuperar credibilidad luego de una serie de pasos en falso a fines de 2017 y en enero pasado, cuando el banco central recortó las tasas con una inflación mucho más alta que lo esperado.
La subasta de deuda local del gobierno argentino el martes, en la que renovó con éxito cerca de US$25.000 millones en bonos que vencían, junto con movimientos coordinados de política monetaria y fiscal, han comenzado a dar confianza a los inversores en que el peso ha encontrado un piso.
"Vimos algún apoyo (el martes) y creo que es por eso que hemos visto un mercado más estable", dijo Gofshteyn de Standard Chartered.
Argentina no planea emisiones internacionales de bonos el resto de este año, y posiblemente ninguna en 2019, una buena señal para los inversores en medio de una venta masiva de bonos que elevó los costos financieros del país.
Hay una reunión del directorio del FMI en Argentina programada para el viernes, para acordar una línea de crédito de aproximadamente US$30.000 millones que ya se da por descontada, dijeron inversores.
El FMI dijo el jueves que quiere avanzar rápidamente en un acuerdo, pero no quiso comentar si establecerá objetivos fiscales.
Buenos Aires y el FMI han dicho que no revelarán una cantidad hasta que el acuerdo se cierre, probablemente el próximo mes. Pero cualquier anuncio de la reunión del viernes podría ser un pilar clave para la estabilidad futura del peso.
El FMI tiene que sorprender al mercado con una oferta mucho mayor a Buenos Aires para respaldar ampliamente al peso, dada la historia de Argentina de déficits abruptos y alta inflación, dijo un gerente de cartera.
"No tienen ninguna necesidad de financiamiento para este año, especialmente después del dinero que recaudaron (el martes) en el mercado local, pero si observan el déficit de la cuenta corriente el próximo año, sus necesidades de financiamiento externo, US$50.000 o US$60.000 millones sería un paquete muy cómodo", dijo Denise Simon, una directora del equipo de deuda de mercados emergentes de Lazard en Nueva York.