El representante del Banco de España indicó que los 100.000 millones de euros de línea de crédito ofrecidos por las autoridades europeas para sanear la banca española y despejar incertidumbres ofrecen un margen suficiente teniendo en cuenta las necesidades identificadas por esta primera auditoría.

Madrid. El ejercicio de estrés llevado a cabo por las consultoras Oliver Wyman y Roland Berger sobre la banca española arroja unas necesidades de capital de hasta 62.000 millones de euros, que se concentran en gran medida en bancos ya participados por el Estado, dijeron el jueves representantes de Economía y el Banco de España.

Según explicó el subgobernador del Banco de España, estas necesidades, calculadas en base a un escenario a 3 años mucho más adverso que el contemplado por los economistas, aportan una orientación inicial del importe agregado que necesita la banca pero no será hasta septiembre cuando se conozca el importe individualizado que precisa cada entidad, que tendrá 15 días para presentar sus planes y nueve meses para cumplir con las exigencias detectadas.

"Todo parece apuntar a que las necesidades agregadas de financiación de capital se van a concentrar en aquellas entidades que están participadas por el FROB", dijo Fernando Restoy en una rueda de prensa junto con el secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre.

Los resultados del ejercicio, realizado para establecer la capacidad de resistencia de la banca española, establecen según Oliver Wyman unas necesidades agregadas en un escenario base de entre 16.000 y 25.000 millones de euros, y entre 51.000 y 62.000 millones en un escenario estresado.

En el caso de Roland Berger, que no proporcionó horquillas sino datos concretos, las necesidades son de 25.600 millones en un escenario base y de 51.800 millones en el más desfavorable, que según indicó Restoy no está considerado por ningún analista.

El representante del Banco de España indicó que los 100.000 millones de euros de línea de crédito ofrecidos por las autoridades europeas para sanear la banca española y despejar incertidumbres ofrecen un margen suficiente teniendo en cuenta las necesidades identificadas por esta primera auditoría.

Según Restoy, aparte de dichas entidades nacionalizadas, el análisis hecho por los evaluadores indica que las tres mayores entidades no necesitarían capital adicional y que habría un tercer grupo de entidades más heterogéneo.

"(Entre estas entidades del tercer grupo) podrían producirse tres situaciones distintas: o bien no necesitan capital, o bien podrían adquirir ese capital por su propios medios, o bien podrían necesitar algún tipo de ayuda pública, en todo caso en estos momentos lo más probable es que tengan una cuantía moderada", dijo.

En la evaluación del proceso ha participado un comité asesor compuesto por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo (BCE), la Autoridad Bancaria Europea (EBA por sus siglas en inglés) y el FMI (Fondo Monetario Internacional).