Cifras de Petrobras muestran que el consumo de productos de petróleo, el año pasado, creció más rápido que el crecimiento esperado del PIB en 2010, de cerca de 7%. Esto revirtió la tendencia histórica en la que el consumo de crudo crecía menos que la economía.
Rio de Janeiro/Sao Paulo. Brasil puede estar al borde de otra ola de importación de combustible debido a que la gasolina está ahora más atractiva que el etanol de caña de azúcar. Pero esta ronda de compras al exterior no cedería tan rápido como la del año pasado.
La pujante economía de Brasil ha impulsado el consumo de combustible, y la producción doméstica de hidrocarburos líquidos -etanol y productos de petróleo- está rezagada en comparación con la demanda.
Esto podría suponer importaciones más frecuentes de gasolina, hasta hace poco algo no escuchado, y mayores compras de diésel y de combustible para avión al menos hasta el 2013, cuando se espera que la petrolera estatal Petrobras abra una nueva refinería.
Aunque relativamente pequeñas, las importaciones tensionarán más un ajustado mercado petrolero mundial y seguirán una tendencia de sorpresiva demanda de America Latina, una región a menudo pasada por alto por operadores que tienden a mirar al oriente.
"En estos primeros dos meses del año vendimos una gran cantidad de gasolina, todavía no estamos importando, pero es obvio que vamos a tener que revisar (los supuestos de demanda)", dijo el director de suministro de Petrobras, Paulo Roberto Costa.
El descubrimiento de enormes reservas petroleras costa afuera de Brasil y la vasta expansión de su programa de etanol de caña de azúcar durante los últimos cinco años han dejado a la nación celebrando su independencia energética y preparándose para convertirse en un exportador de crudo.
Pocos dudan de que Brasil finalmente alcanzará esa meta, aunque la realidad de corto plazo se ha vuelto más complicada. La economía ha estado creciendo más rápido de lo esperado, mientras que también ha usado más combustibles a base de petróleo que en el pasado.
Cifras de Petrobras muestran que el consumo de productos de petróleo el año pasado creció más rápido que el crecimiento esperado del PIB en el 2010 de cerca de un 7%. Esto revirtió la tendencia histórica en la que el consumo de crudo crecía menos que la economía.
El presidente ejecutivo de Petrobras, Jose Sergio Gabrielli, dijo este mes que la compañía espera importar menos gasolina en el 2011 que en el 2010, mientras que la petrolera señaló el jueves que produjo cantidades récord de gasolina en enero "para abastecer el mercado brasileño sin recurrir a importaciones".
Demanda sube
Las refinerías de Brasil están operando sobre el 90 por ciento de la capacidad, la próxima nueva instalación no está programada para entrar en funcionamiento al menos en dos años, y el sector azucarero está reduciendo la inversión en etanol, haciendo que las importaciones parezcan más probables en los próximos años.
Petrobras importó gasolina durante varios meses a comienzos del 2010 debido a que una escasez de cosecha de caña empujó al alza los precios del etanol. Brasil importó al menos dos cargamentos de nafta el mes pasado.
"En general hay una mayor demanda por productos limpios en America Latina y Sudamérica que el saber convencional hubiera creído", dijo Jan Stuart, economista petrolero mundial de Macquarie Securities en Nueva York.
Las ventas de gasolina de Brasil subieron en un 18 por ciento a 399.000 barriles por día (bpd), casi dos veces el incremento que había esperado Petrobras el año anterior, debido a un aumento de la flota de vehículos ligeros del país.
