Una fuente alemana dijo que el mismo Weber había decidido no ser candidato, tras ser informado por el gobierno de su país que su postulación no contaba con el apoyo suficiente en el resto de Europa.
Francfort. El jefe del Bundesbank alemán, Axel Weber, no será candidato para reemplazar al presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet, cuando éste se retire en octubre, dijeron este miércoles fuentes europeas.
Conocido por su dura retórica contra la inflación, Weber, que ha encabezado el banco central alemán en los últimos siete años, era visto como el principal candidato para reemplazar a Trichet.
Pero sus críticas públicas el año pasado al programa de compra de bonos del BCE generaron malestar entre algunos países, como Francia, y le habrían restado posibilidades para presidir el BCE.
"La candidatura de Weber al BCE ya no está en la agenda", dijo una de las fuentes.
Una fuente alemana dijo a Reuters que el mismo Weber había decidido no ser candidato, tras ser informado por el gobierno de su país que su postulación no contaba con el apoyo suficiente en el resto de Europa.
La noticia tomó por sorpresa a los mercados, donde el euro reaccionó con una caída frente al dólar. Posteriormente, el impacto resultó tener corta vida, lo que sugiere que los inversores creen que un duro contra la inflación reemplazará a Trichet, por más que no sea Weber.
Fuentes del Bundesbank dijeron que Weber había dicho a nivel interno que no estaba interesado en buscar un segundo mandato al frente de la institución. Su período vence en abril del 2012.
La renuncia de Weber a postular abre una nueva interrogante en la carrera para reemplazar a Trichet, ya que el alemán, de 53 años, era considerado el candidato principal para el cargo.
Tras ocho años en el puesto, Trichet abandonará el banco en octubre.
El Gobierno de Alemania dijo que la canciller Angela Merkel conversó el miércoles con Weber, pero evitó dar detalles sobre la conversación, a la que un portavoz calificó de "confidencial".
El portavoz Steffen Seibert reiteró que Berlín quería un "candidato fuerte" para reemplazar a Trichet y que esa persona podría ser alemana.
"El tema de quién reemplazará a Trichet no está en la agenda ahora, dado que su mandato no termina hasta fines del otoño (europeo). En cualquier caso, es un tema que será decidido a nivel internacional y el Gobierno alemán tendrá opinión cuando sea el momento", dijo Seibert.
Veintiséis de 42 economistas consultados por Reuters el mes pasado consideraban que Weber era el más probable sucesor de Trichet. En tanto, diez nombraron al jefe del banco central italiano, Mario Draghi, quien sigue una línea más moderada.
El presidente del BCE no determina la política monetaria, que es formulada por los 23 miembros del Consejo de Gobierno, pero influye en el debate político y es la voz principal del banco en su comunicación con los mercados financieros.
Dilema
Quien quiera que reemplace a Trichet asumirá la presidencia del BCE enfrentado al dilema de cómo contener las presiones inflacionarias, especialmente en los estados más grandes de la zona euro, sin asfixiar a los países de la periferia del bloque, acosados por una crisis de deuda.
La inflación en la zona euro se aceleró a un máximo de 15 meses del 2,4% el mes pasado y Trichet dijo la semana pasada que esta se mantendría por sobre la meta del BCE de cerca pero bajo el 2% durante buena parte del 2011.
Se espera que los líderes europeos resuelvan quién será el nuevo jefe del BCE antes de sus vacaciones de verano boreal, y un encuentro programado para junio es considerado el momento en que probablemente se tomaría esta determinación.
El retiro de Weber no significa necesariamente que el puesto no será para un alemán.
Klaus Regling, jefe de la Facilidad Europea de Estabilidad Financiera, es considerado como la segunda opción de Alemania, aunque en noviembre dijo que no estaba interesado.
El principal rival de Weber era el jefe del banco central italiano, que al frente de la Junta de Estabilidad Financiera ha sido responsable de coordinar los cambios a la regulación global.
Otros nombres en el aire incluyen al gobernador del Banco de Finlandia, el moderado Erkki Liikanen; a Ewald Nowotny, del banco central austríaco, y a Yves Mersch de Luxemburgo, que es el miembro del Consejo de Gobierno del BCE con más tiempo en el cargo.
Marco Valli, economista para la zona euro en la firma Unicredit, dijo que con Weber fuera de carrera, ganaba fuerza algún candidato de un país pequeño, nombrando a Mersch o Liikanen.
"El principal problema de Draghi es su nacionalidad. Con la crisis de deuda aún lejos de terminarse, no es fácil ver al BCE inclinarse tan claramente hacia la periferia", sostuvo.