"Hay muchos rumores sobre los bancos franceses pero (...) el problema está muy extendido", agregó. "Ningún sector bancario del mundo puede soportar una pérdida generalizada de confianza y debemos restaurar esa confianza en toda Europa", señaló Antonio Borges director del departamento europeo del FMI.
Bruselas. Europa necesita entre 100.000 millones y 200.000 millones de euros para recapitalizar sus bancos y recuperar la confianza de los inversores, dijo el director del departamento europeo del Fondo Monetario Internacional, Antonio Borges.
"Estamos hablando de cifras entre 100.000 (millones) y 200.000 millones de euros, lo que en nuestra opinión es muy poco comparado con el tamaño de los mercados de capitales europeos y a los recursos del nuevo y mejorado FEEF (Fondo Europeo de Estabilidad Financiera)", agregó Borges en una entrevista con Reuters durante una visita a Bruselas.
"Hay muchos rumores sobre los bancos franceses pero (...) el problema está muy extendido", agregó. "Ningún sector bancario del mundo puede soportar una pérdida generalizada de confianza y debemos restaurar esa confianza en toda Europa", añadió.
Borges señaló que el FMI "participaría definitivamente" en el segundo paquete de rescate para Grecia si queda satisfecho con la determinación del país de resolver sus problemas de deuda".
"Si hay un segundo programa para Grecia, que es lo que se espera, pienso que el FMI definitivamente participará con la condición de que sigamos convencidos de que Grecia está en el buen camino y que se pueden introducir las políticas correctas (...) que su deuda sea más sostenible", añadió.
Borges indicó que no veía un papel fundamental del Banco Central Europeo (BCE) en el aumento de la capacidad del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera.
"Cuando la gente habla con ligereza sobre el apalancamiento del FEEF, tiene en mente usar el FEEF de una forma muy determinada para atraer a los inversores al mercado de deuda soberana, una intervención que restaure la confianza", dijo.
"Creo que todo el mundo es consciente de que incluso este FEEF mucho más grande tiene recursos limitados y debe utilizarse de forma eficiente", agregó.
Borgen apuntó que los inversores tienen preocupaciones válidas sobre una posible recesión, pero negó que los programas de austeridad recomendados por el FMI y los recortes en el gasto público sean responsables de la desaceleración de las economías, en lugar de la pérdida de confianza derivada de unos bancos débiles y vulnerables y la enorme deuda de la región.
Las preocupaciones sobre la recesión "están más relacionadas con los problemas en el sector financiero y la posibilidad de una restricción real del crédito que con lo que está ocurriendo en el frente fiscal", sostuvo.
Por otra parte, Borges expresó que el Fondo Monetario Internacional podría invertir junto con el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera en deuda española o italiana en los mercados primario o secundario, si fuera necesario, dijo el jefe del FMI para Europa, Antonio Borges.
Las compras tendrían como finalidad potenciar la confianza de los inversores en esos instrumentos, agregó Borges.
Para hacer eso, el FMI tendría que crear un vehículo especial que permitiera comprar deuda, algo que se ha hecho en el pasado.