La autoridad monetaria pactó medidas excepcionales para reducir eventuales ganancias privadas ante una devaluación del peso.
La nueva conducción del Banco Central de Argentina acordó con las dos entidades donde se comercializan contratos a futuro frente al dólar una serie de medidas para recortar millonarias pérdidas ante a una previsible devaluación de la moneda local, dijo el martes una fuente involucrada en las tratativas.
La autoridad monetaria pactó medidas excepcionales para reducir eventuales ganancias privadas ante una devaluación del peso, lo que evitará una mayor expansión monetaria, ya que todos los negocios y garantías se concretan en moneda nacional con el valor del dólar estadounidense como referencia.
"Las negociaciones fueron duras porque cada parte defendía lo suyo, pero quedó claro que hubo irresponsabilidad de la conducción anterior (del Banco Central) en avalar valores del peso a futuro que con un cambio de Gobierno serían imposible de sostener", dijo la fuente a Reuters.
La gestión que condujo al Banco Central hasta la semana pasada -cuando asumió un nuevo Gobierno nacional- concertó ventas de divisas a niveles promedio de 10,65 pesos por dólar a marzo del 2016, cuando esos mismos contratos cotizaban entre 14 y 15 unidades en Wall Street.
Esto llevó a que, semanas atrás, diputados denunciaran penalmente por mal desempeño de funciones públicas al directorio de la entidad. Alejandro Vanoli, el ex presidente del organismo, renunció el miércoles pasado, un día antes de la asunción del presidente Mauricio Macri.
El mandatario de centroderecha adelantó el lunes que esta semana se levantarán restricciones vigentes sobre el mercado de cambio, conocidas como "cepo", lo que en la práctica significará una devaluación del peso. La magnitud de esa depreciación no ha sido dada a conocer públicamente.
Operadores del mercado creen que esa devaluación podría rondar hasta niveles de 13,5 a 15 pesos por dólar, muy por encima de las 9,805 unidades en que cotizaba el martes.
En base a esas cifras, el Banco Central hubiera sufrido pérdidas de hasta 70.000 millones de pesos (unos 7.140 millones de dólares) si no acordaba algún cambio de reglas con el 'Rofex' y con el 'MAE', dos entidades donde se comercializan contratos del peso a futuro.
"El nuevo equipo (del banco oficial) termina de cerrar acuerdos donde todos resignan partes pero entendiendo que será lo mejor para dar credibilidad y confianza en la nueva etapa de la economía argentina", agregó la fuente bajo condición de anonimato.
Además de acordar valores de seguros más bajos para recortar pérdidas del Banco Central, los bancos también se comprometieron a liquidar posiciones propias en dólares para ayudar a reforzar las reservas del rector bancario de la tercera mayor economía de América Latina.
Macri, un político bien visto por el sector financiero, asumió con la promesa de reactivar una economía entre recesiva y estancada en los últimos cuatro años, golpeada por una altísima inflación y una retracción de las exportaciones ante una moneda local sobrevaluada.
El nuevo titular del Banco Central de Argentina, Federico Sturzenegger, dijo el lunes -en su primer día oficial en el cargo- que su prioridad será controlar la acelerada inflación, a la que consideró el verdadero problema de la economía, más allá de donde se ubique el tipo de cambio.