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Banco Central de México decide mantener en 4,5% la tasa de interés
Viernes, Mayo 27, 2011 - 09:30

En México, la actividad económica continuó exhibiendo una trayectoria ascendente, si bien los indicadores oportunos de producción muestran una moderación en su ritmo de expansión.

Durante los primeros meses de 2011 la economía mundial continuó creciendo aunque a ritmo más moderado, en buena medida como reflejo de una disminución en la tasa de crecimiento de la producción industrial en las principales economías
avanzadas. En Estados Unidos, la actividad económica se ha desacelerado, en un contexto en el que tanto el desempleo como el endeudamiento de los hogares continúan siendo elevados.

Además, permanece la incertidumbre sobre si la recuperación en ese país será sostenible una vez que se retiren los estímulos fiscal y monetario. En Europa persisten los problemas fiscales de varios países miembros de la Unión. En particular, la situación económica de Grecia y Portugal continúa deteriorándose. En Japón, diversos indicadores apuntan a que el impacto adverso de los lamentables desastres naturales ocurridos en ese país pudiera ser mayor al anticipado hace unas semanas. En cuanto a las economías emergentes, varias de éstas mantuvieron un crecimiento vigoroso, apoyado por sus demandas internas y por condiciones de liquidez favorables en los mercados financieros internacionales.


Por su parte, la inflación general, así como sus expectativas para el corto plazo, se han incrementado en las principales economías avanzadas como resultado del alza en los precios de los productos primarios.

No obstante, la inflación subyacente permanece baja y las expectativas de inflación de largo plazo se han mantenido estables.

Asimismo, las cotizaciones internacionales del crudo y otras materias primas han mostrado un ajuste a la baja en las últimas semanas. No obstante, un número importante de países emergentes siguió observando presiones inflacionarias derivadas de los altos precios de mercancías alimentarias, así como de un sobrecalentamiento de sus economías. En respuesta, los bancos centrales de dichos países continúan retirando el fuerte estímulo monetario que introdujeron en años pasados.

En general, el balance de riesgos para el crecimiento mundial ha mostrado cierto deterioro, mientras que el de inflación ha mejorado.

En México, la actividad económica continuó exhibiendo una trayectoria ascendente, si bien los indicadores oportunos de producción muestran una moderación en su ritmo de expansión. No obstante, algunos de estos parecieron responder a factores que afectaron a la producción de manera temporal, como los efectos de lo ocurrido en Japón sobre las ensambladoras automotrices ubicadas en México.

La moderación en el crecimiento ha conducido a una reducción en el ritmo al que se venía cerrando la brecha del producto, mientras que la situación en los mercados de trabajo y crediticio, la evolución de la capacidad instalada, así como el reducido déficit en cuenta corriente aún muestran signos de holgura. Por todo ello, no se observan presiones generalizadas sobre los precios en la economía.


La inflación general anual se mantiene dentro de lo previsto en el Informe sobre la Inflación más reciente. En particular, el
componente subyacente continúa exhibiendo la trayectoria descendente observada desde diciembre de 2010, y es de destacar
que dicho indicador, excluyendo los genéricos tortillas y tabaco, ha mostrado una variación anual inferior a la meta de 3% desde enero pasado. Los niveles actuales de inflación son consecuencia de varios factores: la tendencia descendente de los costos unitarios de la mano de obra, el desvanecimiento del impacto de los cambios tributarios del año pasado, el buen
comportamiento de la inflación no subyacente, así como la evolución favorable del tipo de cambio, que ha obedecido tanto a
los flujos de capitales externos, como al ritmo de crecimiento de las exportaciones del país.

El repunte de la inflación que se observó en abril se debió al comportamiento de la no subyacente, principalmente a las alzas que se observaron en los precios de algunos productos agropecuarios. Hacia adelante existen riesgos de alzas adicionales en los precios de los granos y otras materias primas, de que retorne la turbulencia en los mercados financieros internacionales y de que la brecha del producto se cierre aceleradamente. En todo caso, se espera que durante 2011 la inflación general y la subyacente continúen dentro de la trayectoria publicada en el último Informe sobre la Inflación. A pesar de los riesgos expuestos, se considera que el balance de éstos ha mostrado una mejoría.

Dados los elementos precedentes, la Junta de Gobierno decidió mantener sin cambio el objetivo para la Tasa de Interés
Interbancaria a un día. Pero, vigilará el comportamiento de las expectativas de inflación, la brecha del producto y, con
especial atención, los precios de los granos y de otras materias primas, así como diversos determinantes de la inflación que
pudieran alertar acerca de presiones inesperadas y de carácter generalizado sobre los precios. Así, en caso de que, a juicio de la Junta, esta última eventualidad se materialice, el Instituto Central ajustará oportunamente la postura monetaria para lograr la convergencia de la inflación a su objetivo permanente de 3%.

Autores

AméricaEconomía.com