Una mayoría de analistas no esperaba cambios en el costo del crédito en esta ocasión y más bien ubican un aumento en diciembre, de acuerdo con una consulta de Reuters.
El banco central mexicano dejó estable este lunes en un mínimo de 3% la tasa clave de interés, aunque sugirió que está dispuesto a actuar con toda flexibilidad para consolidar la permanencia de la inflación dentro de su objetivo.
La entidad aseguró en su comunicado de política monetaria que vigilará de cerca todos los determinantes de la inflación, sobre todo la postura monetaria local respecto a la Reserva Federal de Estados Unidos y un eventual traspaso del movimiento del tipo de cambio a los precios.
"Esto con el fin de estar en posibilidad de tomar las medidas necesarias, con toda flexibilidad y en el momento en que las condiciones lo requieran, para consolidar la convergencia de la inflación al objetivo de 3%", indicó.
Una mayoría de analistas no esperaba cambios en el costo del crédito en esta ocasión y más bien ubican un aumento en diciembre, de acuerdo con una consulta de Reuters.
La estabilidad de la tasa, en ese nivel desde junio de 2014, ocurre cuando la economía marcha a ritmo lento y la inflación local se ubica en mínimos, aun cuando la moneda se ha depreciado poco más de 13% en lo que va del año, un ajuste similar al de todo 2014.
El banco central mexicano estima que la inflación local se mantendrá en niveles alrededor de su objetivo en lo que resta de este año y en 2016.
"Sin embargo, las posibles acciones de política monetaria por parte de la Reserva Federal podrían tener repercusiones sobre el tipo de cambio, las expectativas de inflación y, por ello, sobre la dinámica de los precios en México", advirtió.
La Fed mantuvo el jueves sin cambios su tasa de interés de referencia, reconociendo que hay preocupación por una economía mundial débil.
El jefe del banco central mexicano, Agustín Carstens, dijo a Reuters a finales de agosto que la entidad probablemente subirá las tasas de interés una vez que la Fed haga lo mismo.