El presidente del Banco Central, Julio Velarde, dijo que el Producto Interno Bruto del Perú crecerá en un 10,7% este año y en un 4,5% en el 2022. "Estamos haciendo estas proyecciones con un velo de ignorancia con respecto al accionar del nuevo gobierno", aclaró.

Lima. El Banco Central de Perú dijo este viernes que mantuvo sus proyecciones de crecimiento económico para este y el próximo año en un 10,7% y en un 4,5%, respectivamente, señalando que las estimaciones de producción dependerán de las acciones que emprenderá el nuevo gobierno en el país minero.

Perú celebró una segunda ronda electoral presidencial el 6 de junio, y el candidato socialista Pedro Castillo terminó primero con un estrecho margen frente a la derechista Keiko Fujimori, según el conteo de sufragios de la oficina electoral.

Pero el ganador aún no ha sido anunciado oficialmente por el organismo electoral, debido a que el partido de Fujimori ha presentado impugnaciones y solicitudes de anulación de votos.

La economía del segundo mayor productor mundial de cobre se hundió en el 2020 un 11,12%, su peor desempeño en tres décadas, cuando tuvo que paralizar casi toda su actividad productiva por el brote la pandemia del coronavirus. Para este año, la economía ya opera casi a plena capacidad y se espera un rebote.

"Estamos haciendo estas proyecciones todavía con un velo de ignorancia con respecto al accionar y a la reacción que tendrá la economía a las medidas que podría tomar el nuevo gobierno", dijo el presidente del Banco Central, Julio Velarde, en una conferencia virtual sobre proyecciones macroeconómicas.

Los dos candidatos presidenciales tienen puntos de vista muy opuestos, con Castillo prometiendo un viraje hacia la izquierda y mayores impuestos a los mineros; mientras Fujimori se ha comprometido a mantener un clima favorable a los negocios.

La minería es clave para la economía local porque representa el 60% de las exportaciones totales del país andino.

Velarde afirmó además que el banco espera que la inflación para este año se sitúe en un 3,0% y el próximo en 2,0%. Asimismo, aumentó levemente la proyección de déficit fiscal para este año hasta un 4,5% del PIB, desde el 4,4%/PIB previsto antes.

"Hay incertidumbre con respecto al cambio tributario y al gasto corriente que pueda hacer el gobierno y en este escenario que todavía hay mucho desconocimiento de las acciones que pueda hacer el nuevo gobierno, es que es un supuesto razonable", dijo.