El economista jefe de Standard and Poor's para Europa, Jean-Michel Six, dijo que los mercados esperan que el BCE reactive su operación de compra de bonos para calmar la turbulencia del mercado.
Francfort. Una ralentización económica y la turbulencia del mercado de deuda llevarían a que el Banco Central Europeo (BCE) probablemente haga una pausa en su ciclo de aumentos de tasas de interés e incluso podría dar el jueves una señal sobre su disposición a comprar bonos de nuevo.
La reunión del banco central, que comenzó a las 0700 GMT, llega en un momento de ralentización del crecimiento en el núcleo de la zona euro y con la extensión de la crisis de deuda a Italia - algo que ha alarmado a los políticos y puesto de nuevo en el foco de atención el plan de compra de bonos del
BCE.
El economista jefe de Standard and Poor's para Europa, Jean-Michel Six, dijo que los mercados esperan que el BCE reactive su operación de compra de bonos para calmar la turbulencia del mercado.
La perspectiva para las tasas de interés globales ha cambiado desde el ajuste iniciado este año y el banco con sede en Francfort se reúne un día después de que Suiza rebajó sus tasas de interés.
El Banco de Japón también relajó este jueves su política monetaria al impulsar la compra de activos y apoyar la intervención de Tokio para debilitar el yen.
Se espera que el BCE deje sin cambios las tasas de interés en un 1,5%.
Es altamente improbable que el presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, cuyo mandato de ocho años expira a finales de octubre, indique una reversión de la política de ajuste que inició con un aumento de tasas de interés en abril, seguida de otra el mes pasado.
Pero la ralentización de la zona euro significa que cualquier subida de tasas adicional no vendría antes del cuarto trimestre. Con la desaceleración de la inflación en julio, es probable que Trichet señale que el BCE está en modo de espera en torno a su política monetaria.
"Esperaría algunos comentarios más suaves sobre la economía y honestamente puede permitírselo porque el BCE ha fortalecido su credibilidad en el sentido de que fue el primer gran banco occidental que endureció (su política)", dijo Gilles Moec, de Deutsche Bank.
"Si hay un banco central que puede permitirse tomar un respiro y mirar la situación por seis meses antes de tomar una decisión de ajuste adicional, ése es el BCE", añadió.
Programa de bonos. Trichet ofrecerá a las 1230 GMT una rueda de prensa tras la reunión y se enfrentará a preguntas sobre si el BCE está preparado para reactivar su programa de compra de bonos, que ha dejado en hibernación por 18 semanas pese a que los mercados han puesto en su objetivo a Italia y España.
Con muchos diseñadores de políticas de vacaciones, hay pocas perspectivas de una acción urgente en ese frente y el fondo de rescate de la zona euro no puede usar sus nuevos poderes para comprar bonos en el mercado secundario o dar a los estados líneas de crédito hasta que se aprueben en los parlamentos de cada país a finales de septiembre como pronto.
Eso deja al BCE como último bastión frente a los ataques del mercado sobre Italia y España a corto plazo.
"Esperaría que Trichet intente elevar la probabilidad de que puedan intervenir, pero no más que eso", dijo Moec de Deutsche.
La Unión Europea apoyó el miércoles a Italia y España, cuyos rendimientos de deuda subieron a máximos de 14 años, pero reconoció que los inversores dudan ahora sobre si la zona euro podrá sobreponerse a las preocupaciones de su deuda soberana.
"El acuerdo de la cumbre para ampliar el alcance de la Facilidad Europea de Estabilidad Financiera (EFSF, por su sigla en inglés) fue un paso muy positivo", dijo el economista de BNP Paribas Ken Wattret.
"Pero mientras haya retraso para que estos cambios sean operativos, sería bien recibido que el BCE cubriera ese hueco reiniciando su SMP (programa de compra de bonos) y comprando en un amplio abanico de mercados", añadió.
En mayo, los mercados se pusieron frenéticos después de que Trichet dijo que el consejo de gobierno del banco no había hablado de la opción de comprar bonos de gobiernos. Cuatro días después, el BCE dio un giro radical e inició el programa de compra, que fue controvertido internamente y al que se oponía Axel Weber, que después abandonó como cabeza del Bundesbank.
"Es posible que el BCE pueda reactivar su programa de recompra de bonos, posiblemente incluso durante la rueda de prensa", dijo el economista de Nomura Jens Sondergaard.
"Pero necesitamos ver un fuerte deterioro desde aquí antes de que actúen", añadió.