Esto equivale a US$1.200 millones, recursos que no serían devueltos al Banco Central de Bolivia (BCB).
La Paz. El gobierno propuso, a través de un proyecto de ley que remitió a la Asamblea Legislativa, el uso del 10% (US$1.200 millones) de las Reservas Internacionales Netas (RIN) para un fondo de desarrollo productivo. Los recursos, se aclara, no serán devueltos al Banco Central de Bolivia (BCB).
El artículo 3, parágrafo III del proyecto de ley señala que el Fondo para la Revolución Industrial Productiva (Finpro) se financiará inicialmente con un monto de hasta US$1.200 millones provenientes de las reservas internacionales que administra el BCB, “sin cargo a devolución o reposición”.
Además añade que la transferencia de estos recursos afectará “las reservas patrimoniales y/o el patrimonio del BCB”.
El parágrafo IV del citado artículo aclara que para la transferencia de estos recursos no se aplicarán las restricciones contenidas en la Ley 1670 y otras disposiciones legales contrarias.
Respecto al acceso a los recursos, la norma indica que “el financiamiento tendrá carácter no reembolsable en la etapa de preinversión y reembolsable en la etapa de inversión”.
Precisamente sobre este punto, la Disposición Transitoria Única de la norma señala que “el Finpro iniciará sus actividades financiando la implementación de plantas de concentración y fundición de minerales, plantas de producción de textiles, plantas de industrialización de madera y plantas de industrialización de alimentos”.
Como el Estado no cuenta con ninguno de estos sectores productivos, excepto la Empresa Metalúrgica Vinto, se entiende que el Finpro financiará los estudios de preinversión de cada una de estas unidades productivas.
Industrialización. El presidente Evo Morales Ayma remitió a la Asamblea Legislativa un proyecto de ley para utilizar parte de las RIN en la industrialización de materias primas, en el marco de las conclusiones del Encuentro Plurinacional.
En tanto explicó en rueda de prensa que el gobierno utilizará hasta US$1.200 millones de las RIN para otorgar valor agregado a los productos nacionales.
Para esto, “el Estado tendrá como socios a las alcaldías y gobernaciones”.
“En cumplimiento a ese Encuentro Plurinacional, es la primera propuesta que estamos enviando a la Asamblea Plurinacional sobre el uso de por lo menos hasta US$1.200 millones para temas productivos. Es un fondo para la industrialización productiva y sólo se usará para darle valor agregado a nuestros productos”, afirmó.
Hasta el 7 de febrero, las RIN alcanzaron a US$12.494,1 millones. El Jefe de Estado explicó que el “gran planteamiento del pueblo boliviano es avanzar en la industrialización y la única forma de garantizarla es con socios a la cabeza del gobierno nacional como contempla la Constitución Política del Estado”.
Morales recordó que hasta 2005 el Estado boliviano tenía un monto acumulado de RIN de US$1.700 millones, una cifra que se multiplicó en sólo seis años hasta llegar en 2011 a más de US$12 mil millones.
“Por tanto, es una pequeña parte de las reservas internacionales” que se utilizará en la industrialización, afirmó el mandatario.
El fondo maduró desde 2011. Recursos. En una entrevista del 18 de agosto, el presidente del BCB, Marcelo Zabalaga, reveló que la entidad monetaria propuso al Ejecutivo la creación de un mecanismo para utilizar las reservas y “mantener un nivel adecuado” de las mismas.
Además, señaló que este mecanismo sería un Fondo de Desarrollo Productivo y tendría US$2.000 MM.
Advierten de riesgos en el uso de las reservas. La inversión que vaya a realizar el Fondo para la Revolución Industrial Productiva (Finpro) con los US$1.200 millones de las reservas monetarias es riesgoso, por lo que se debe determinar a quién o a quiénes se les entregarán los recursos y bajo qué condiciones se lo hará.
A esa conclusión arribaron el expresidente del Banco Central de Bolivia (BCB) Armando Méndez y el ex ministro de Desarrollo Económico y analista económico Horst Grebe.
Según Armando Méndez, todo fondo siempre tiene riesgos y para minimizarlos la entidad debe ser administrada por profesionales con transparencia y eficiencia.
“En el momento en que se de la plata, si se equivocan, empiezan a aparecer elefantes blancos como (el caso) Papelbol y la única forma de que esto no sea así es que este fondo tenga un personal altamente profesional y competente”, señaló la ex autoridad.
Pérdida. Por su parte, Horst Grebe explicó que se debe “tener mucho cuidado” en la asignación de los recursos del fondo y sugirió que primero se debe saber en qué condiciones serán asignados y quiénes serán los beneficiarios.
“Por lo visto no se va a recuperar el dinero del Banco Central (de Bolivia) que está entregando US$1.200 millones a fondo perdido y el ente administrador de ese dinero lo va a invertir una parte en preinversión y la otra en inversión”, enfatizó el ex ministro.
Con la medida, dijo Grebe, se está volviendo a restablecer los ex bancos del Estado y Agrícola que había en años anteriores.
