El banco central japonés (BOJ, por su sigla en inglés), que relajó sorpresivamente su política el mes pasado, mantuvo las tasas de interés sin cambios en un rango de cero a 0,1%, como se esperaba ampliamente.
Singapur. Las bolsas en Asia tocaron este martes un máximo en una semana, manteniéndose firmes gracias a los recientes signos de mejoría en la economía estadounidense, mientras que el yen subió después de que el Banco de Japón mantuvo estable su política monetaria.
El banco central japonés (BOJ, por su sigla en inglés), que relajó sorpresivamente su política el mes pasado, mantuvo las tasas de interés sin cambios en un rango de cero a 0,1%, como se esperaba ampliamente. También se abstuvo de cualquier expansión de su programa de compra de activos.
En Asia, el dólar cayó a un mínimo intradiario de 81,97 yenes tras la decisión del BOJ y más tarde cotizaba con una baja de 0,1%, a 82,18 unidades.
En el mercado bursátil nipón, el índice Nikkei de la bolsa de Tokio finalizó el día con un alza de un 0,1% en 9,899.08 puntos, después de haber trepado sobre las 10.000 unidades más temprano en la sesión.
El índice MSCI de acciones asiáticas fuera de Japón ganaba un 1,4% y alcanzó su mayor nivel desde el 5 de marzo durante la sesión luego de caer este lunes debido a preocupaciones sobre una moderación de la demanda china.
Después de la decisión política del BOJ, el foco ahora pasará a la declaración política de la Reserva Federal de Estados Unidos más tarde en la jornada. El anuncio de la Fed será seguido de cerca, sobre todo después de que los datos del viernes pasado mostraron un aumento alentador de más de 200.000 empleos en febrero por tercer mes consecutivo.
Los recientes indicios de mejoría en la economía más grande del mundo le han dado un impulso al dólar y han llevado a reconsiderar si la Fed necesita aplicar un mayor estímulo Para la economía.
En los mercados de materias primas, el oro subía a US$1.702,49 la onza, mientras que los futuros del crudo estadounidense trepaban un 0,5% a US$106,92 tras caer el lunes por los temores sobre China y las preocupaciones de una recesión en Italia.