Un repunte inspirado en estímulos de bancos centrales que llevó a las acciones globales a subir en torno a un 15% desde los mínimos de principios de junio se ha detenido esta semana.

Londres. Las bolsas europeas bajaban y el euro operaba estable este viernes, en curso a cerrar la semana con caídas en momentos en que las preocupaciones sobre la crisis de la zona euro, las próximas elecciones de Estados Unidos y la desaceleración del crecimiento global limitan el atractivo de los activos de riesgo.

Después de haber disfrutado de un avance de un 1,2% el jueves, el índice Euro STOXX 50 caía un 0,3% a 2.478,57 puntos. Se encamina a cerrar la semana con una caída de más o menos un 1,4%.

"Con la preocupación por el estado de la economía mundial que vendrá a la palestra esta semana, junto con el ánimo negativo que rodea la desaceleración de China, y la temporada de ganancias y el acantilado fiscal atrayendo la atención negativa en Estados Unidos, la visibilidad en los mercados de valores en el corto plazo se mantiene nublada por decir lo menos", dijo Daniel Victory de Capital Spreads en Londres.

Un repunte inspirado en estímulos de bancos centrales que llevó a las acciones globales a subir en torno a un 15% desde los mínimos de principios de junio se ha detenido esta semana.

El índice FTSE 100 de Londres, el DAX de Francfort y el CAC de París estaban en terreno negativo a las 0715 GMT.

Después de un cierre plano en Wall Street, el índice MSCI de acciones asiáticas fuera de Japón subió un 0,3%, pero el índice Nikkei de la bolsa de Tokio cayó un 0,2% a su nivel más bajo en más de dos meses.

Con muchos mercados atrapado en rangos mientras los inversores esperan a ver si España pide un rescate, el euro subía a US$1,2962. Los futuros de los Bunds alemanes ganaban 21 puntos básicos a 141,36 a las 0715 GMT, mientras que los rendimientos de los bonos españoles e italianos exhibían escasa variación.

Las materias primas -con la excepción del petróleo- también se encaminan a terminar la semana en números rojos con los inversores temerosos por la desaceleración en China, que dará a conocer sus datos más recientes sobre comercio durante el fin de semana.