El país sudamericano aplicará una tarifa antidumping de US$4,1 por kilogramo en varias fibras sintéticas hechas en China, según un comunicado del ministerio de Industria y Comercio.
Brasilia. Brasil dijo este martes que aplicará tarifas a importaciones sobre bienes específicos de China y Estados Unidos, la última medida para ayudar a frenar un diluvio de baratas importaciones que está erosionando la balanza comercial del país.
La medida se produce sólo días antes de que la presidenta Dilma Rousseff viaje a China, donde quiere discutir lo que Brasil considera una asimétrica balanza comercial con el gigante asiático.
La última medida es parte de un esfuerzo mayor de Rousseff, que asumió el poder en enero, de ponerse dura sobre las importaciones, particularmente aquellas que vienen de China.
Brasil aplicará una tarifa antidumping de US$4,1 por kilogramo en varias fibras sintéticas hechas en China, según un comunicado del ministerio de Industria y Comercio.
El gravamen tendrá validez por cinco años y viene en respuesta a la demanda de la industria textil brasileña, aseguró el ministerio, sin dar mayores detalles.
Se produce dumping cuando un fabricante vende bienes en el exterior por debajo de sus costos de producción o de los precios domésticos.
El gobierno también desea una supervisión más dura por parte de funcionarios de aduana para revisar el alza del contrabando de productos chinos.
Líderes de la industria dicen que la barata moneda china y subsidios a las exportaciones constituyen un comercio injusto.
Pero un alza en la carga impositiva y menor productividad a nivel local son igualmente culpados por la caída en la competitividad de la mayor economía de América Latina, según analistas.
Brasil también aplicará una tarifa provisional antidumping por hasta seis meses en un solvente llamado n-Butanol vendido por compañías químicas estadounidenses, incluyendo Dow Chemical Co y Eastman Chemical Co.