"No habrá alzas (de precios)", dijo Guido Mantega a periodistas al llegar a las oficinas del ministerio en Brasilia.

Brasilia. Los precios de la gasolina en Brasil, controlados por el gobierno, no subirán pese a que la moneda del país ha registrado sus niveles más bajos desde el 2009, dijo este martes el ministro de Hacienda, Guido Mantega.

"No habrá alzas (de precios)", dijo Mantega a periodistas al llegar a las oficinas del ministerio en Brasilia.

La empresa petrolera estatal Petrobras ha estado importando gasolina y diésel a precios internacionales y vende con pérdidas el combustible en el mercado local, donde el Gobierno controla los precios.

Eso ha ayudado a que las tasas de inflación a 12 meses bajen desde niveles máximos en seis años, abonando el camino para que el Banco Central recorte agresivamente las tasas de interés, en un esfuerzo por estimular el crecimiento de la economía.

El ministro de Energía, Edison Lobão, dijo el 3 mayo que los precios de la gasolina y del diésel serían elevados solo cuando los precios internacionales del petróleo toquen los 130 dólares por barril. El precio del crudo estadounidense se negociaba a US$94,85 el barril el martes.

La moneda de Brasil, el real, alcanzó el martes un tipo de cambio de dos unidades por dólar por segunda sesión consecutiva, su nivel más débil desde el 2009, por preocupaciones globales ante los problemas financieros que ocasionaría una posible salida de Grecia de la zona euro.