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Brasil probablemente no cumpliría con la meta de inflación en 2011
Viernes, Enero 6, 2012 - 05:06

El objetivo oficial de inflación del banco central era de un 4,5%, con una "banda de tolerancia" de 2 puntos porcentuales en ambas direcciones.

Sao Paulo. El gobierno de Brasil probablemente incumplió su meta de inflación para el 2011, lo que sería una vergüenza para la presidenta Dilma Rousseff, pero no una preocupación para los inversores que creen que el problema está controlado y que las tasas de interés seguirán cayendo este año.

Datos que serán publicados por el gobierno a las 0900 hora local (1100 GMT) de este viernes mostrarían que los precios al consumidor subieron un 6,56% el año pasado, según el pronóstico promedio obtenido en un sondeo de Reuters a un grupo de analistas.

El objetivo oficial de inflación del banco central era de un 4,5%, con una "banda de tolerancia" de 2 puntos porcentuales en ambas direcciones. Si el resultado se confirma, sería la primera vez que Brasil incumple su rango de meta de inflación desde el 2003.

En este punto, las consecuencias se inclinan más a ser políticas que financieras. Los inversores ya han digerido las consecuencias de un decepcionante 2011 en Brasil, donde la mayor economía de América Latina sólo creció un 3%, muy por debajo del ritmo que la hizo una estrella en los últimos años.

La inflación alcanzó en septiembre su punto máximo en un período de 12 meses a un 7,31% y se espera que siga cayendo.

El enfoque ahora ha pasado a cuánto más el banco central recortará sus tasas de interés en el 2012 para evitar el contagio de la crisis de deuda en la zona euro y proporcionar un estímulo a los consumidores locales que repentinamente asumieron una posición conservadora.

"No es algo bueno si no alcanzan la meta, pero la verdad es que Brasil tiene desafíos más grandes ahora", dijo Gray Newman, economista jefe de América Latina de Morgan Stanley.

Rousseff podría no salir del paso con tanta facilidad ante el público brasileño, que es especialmente sensible a los precios debido a los recuerdos de la hiperinflación en la década de 1990.

Los periódicos casi con seguridad criticarán a la líder de centroizquierda por errar el blanco durante su primer año de gobierno, a pesar de su compromiso de no "generar un desbarajuste" con la inflación.

Autores

Reuters