La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, anunció exenciones de impuestos e incentivos focalizados que ascienden a 25 millones de reales (casi US$16.000 milones), durante dos años.
Brasil prepara medidas de corto y mediano plazoa para ir en ayuda de su industria local, luego de que este miércoles se diera a conocer un reporte donde se observa una baja en la producción industrial en junio (1,6%).
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, anunció exenciones de impuestos e incentivos focalizados que ascienden a 25 millones de reales (casi US$16.000 milones), durante dos años.
Asimismo, Brasil endurecerá las barreras comerciales para proteger a los fabricantes locales, afectados por un aumento de las importaciones procedentes de China.
El plan, llamado "A Bigger Brasil", eliminará impuestos para el 20% del personal de las industrias tales como la de zapatos y las empresas de software afectadas por la baja del real en 48% desde finales de 2008, lo que ha reducido el costo de las importaciones y fortalecido las antiguas quejas del sector a raíz de los costos excesivos.
"Este es el primer paso para impulsar la competitividad de Brasil, confiando en la innovación, exigiendo un mayor valor agregado y la lucha contra las prácticas desleales y fraudulentas de los competidores", dijo Rousseff en un evento en Brasilia, según publicó Bloomberg.
El ministro de Finanzas, Guido Mantega, dijo que los recortes de impuestos dirigidos en cuatro sectores industriales podría extenderse en una fecha posterior y será parcialmente compensado por una exención impositiva adicional de al menos 1,5%. Los cambios en los impuestos le costará al Tesoro 1.300 millones de reales al año (más de US$839M).