La Oficina Nacional de Estadísticas (ONS) divulgó este viernes las cifras del producto interior bruto (PIB) de octubre a diciembre de 2012, cuando la caída del sector industrial y la falta de actividad en el de servicios arrojaron números más negativos que lo pronosticado por los analistas.
Londres, EFE. La economía del Reino Unido se contrajo un 0,3% en el último trimestre de 2012, más de lo anticipado por los expertos, que hace temer que otros datos negativos en los tres primeros meses de 2013 empujen al país a una nueva recesión.
La Oficina Nacional de Estadísticas (ONS) divulgó este viernes las cifras del producto interior bruto (PIB) de octubre a diciembre de 2012, cuando la caída del sector industrial y la falta de actividad en el de servicios arrojaron números más negativos que lo pronosticado por los analistas, que habían situado la caída en el 0,1%.
La contracción, frente al crecimiento del PIB de un 0,9% en el trimestre anterior, es un duro golpe para el gobierno británico, que desde octubre de 2010 viene aplicando un profundo programa de recortes en el sector público.
Las críticas contra la política del gobierno llegaron desde la oposición laborista y desde el sector sindical, que han cuestionado la efectividad de unas medidas que no consiguen hacer repuntar la economía del Reino Unido, que salió de la segunda recesión en la que estaba sumido en el tercer trimestre de 2012.
La ONS indicó hoy que la producción económica durante 2012 fue en general plana, pese al crecimiento en el tercer trimestre -julio a septiembre- por la celebración de los Juegos Olímpicos de Londres y los festejos de los 60 años del reinado de Isabel II.
La producción industrial británica descendió entre octubre a diciembre de 2012 un 1,8%, aunque el movimiento en el sector de la construcción aumentó un 0,3%, según la ONS.
Lo más preocupante para los expertos es que la actividad en el sector servicios, considerado el pulmón económico del Reino Unido pues contribuye en un 75% al PIB, fue plana.
Los expertos temen que de repetirse la caída del PIB en el primer trimestre de 2013, el Reino Unido entrará en su tercera recesión en casi cinco años, después de la de 2008-2009 y la de 2011-2012.
A pesar de este retroceso del PIB, un portavoz del primer ministro británico, David Cameron, afirmó hoy que las cifras "recuerdan la situación económica tan difícil que afronta el país".
"La posición del primer ministro es que, sin duda, tenemos la correcta política económica", apuntó el portavoz.
En un tono similar se manifestó el ministro de Economía, George Osborne, que achacó los números rojos a la deuda acumulada por el anterior Gobierno laborista y a la crisis en la zona euro.
"El Reino Unido afronta una situación económica muy difícil", insistió Osborne desde la localidad suiza de Davos, donde participa en la reunión anual del Foro Económico Mundial.
"Ahora, o huimos de estos problemas o los afrontamos. Y yo estoy determinado a afrontarlos para que podamos crear empleos para la población de este país", puntualizó.
Sin embargo, el portavoz de Economía laborista, Ed Balls, acusó a Cameron y Osborne de "quedarse dormidos al volante" porque la economía no repunta y calificó de "fracaso" el programa de austeridad de la coalición entre conservadores y liberaldemócratas.
Para el secretario general de la Confederación de Sindicatos Británicos (TUC, siglas en inglés), Frances O'Grady, la "estrategia económica del Gobierno de coalición ha sido un desastre".
Las cifras de hoy serán revisadas el mes próximo, pero los expertos no descartan otro periodo recesivo, definido como dos trimestres consecutivos de contracción económica, por la debilidad de la producción, el mal tiempo que afecta al país y los problemas de las exportaciones británicas debido a la crisis en la zona euro.
Lo que más inquieta a los expertos es la posibilidad de que el Reino Unido pueda perder la calificación crediticia de triple A, que las principales agencias de calificación de riesgo han situado en "observación negativa".