Existe preocupación por la escasa recaudación impositiva, que está más de US$300 millones por debajo de lo previsto, algo que dificultará que el gobierno cumpla sus objetivos presupuestarios al cierre el actual ejercicio fiscal, el próximo 30 de junio.

San Juan. La economía de Puerto Rico acumula un retroceso del 3,3% en diez meses de año fiscal si se compara con el mismo periodo del ejercicio anterior, según datos del Banco Gubernamental de Fomento de la isla.

Sólo en el mes de abril se registró una caída del 1,3% respecto a un año antes en el Índice de Actividad Económica, un indicador que elabora el gobierno local a partir de cuatro datos: la evolución del empleo no agrícola, la generación de energía eléctrica, el consumo de gasolina y la venta de cemento.

A falta de dos meses para que acabe el actual ejercicio fiscal, durante los diez primeros meses el empleo no agrícola acumulaba una caída del 1,5 % respecto al mismo periodo del año anterior, la generación eléctrica un 3,1 %, el consumo de gasolina un 2,1 % y la venta de cemento un 14,6 %.

Por lo que se refiere sólo a los datos de abril, el empleo no agrícola registró una avance del 0,2 % respecto al mismo mes de 2013, gracias a que el sector privado creó 10.700 empleos, lo que supone un aumento del 1,6 % que compensó la destrucción de 8.700 empleos en el sector público (-3,5 %).

Además, aunque la producción de energía en abril descendió el 2 % respecto al mismo mes del año anterior y las ventas de cemento se derrumbaron un 17,5 %, el consumo de gasolina avanzó un 0,8 %.

En el informe publicado por el Banco Gubernamental de Fomento se revisan además a la baja los datos de marzo, para indicar que el índice retrocedió un 1 % en ese mes, frente al 0,8 % que había publicado inicialmente.

Así, en abril empeoraron unas cifras que desde diciembre habían mostrado todos los meses síntomas de ligera recuperación. Desde enero de 2013 la actividad económica ha retrocedido todos los meses, después de cerca de un año de subidas.

El producto interior bruto (PIB) de Puerto Rico -cuya evolución no es igual que la del índice que elabora el Gobierno de la isla, pero se acerca mucho- empezó a caer en el ejercicio fiscal de 2007, cuando bajó un 1,2 %.

En el ejercicio de 2008 retrocedió un 2,9 %, en 2009 un 3,8 %, en 2010 un 3,6 % y en 2011 un 1,6 %, mientras que en 2012 cerró con un avance del 0,1 %, y en 2013 volvió a caer, en ese caso un 0,3 %.

Las cifras correspondientes a abril se publicaron el mismo día en que el equipo económico del Gobierno volvió de Nueva York, tras reunirse con las grandes agencias de calificación crediticia, que mantienen a la deuda de la isla en el nivel de las inversiones especulativas (el de los bonos "basura" o "chatarra").

Estas agencias han expresado preocupación por la escasa recaudación impositiva, que está más de 300 millones de dólares por debajo de lo previsto, algo que dificultará que el Gobierno cumpla sus objetivos presupuestarios cuando cierre el actual ejercicio fiscal, el próximo 30 de junio, para el que había previsto no tener un déficit de más de US$650 millones.