Slim reconoció que el éxito del controvertido constructor neoyorquino y estrella televisiva sería bueno para México y dijo que algunas de sus propuestas le gustan, como el esquema de asociación público-privado para infraestructura.
Ciudad de México. El magnate Carlos Slim dijo este jueves que estaría más preocupado sobre el presidente electo Donald Trump si fuera estadounidense en vez de mexicano y que los consumidores de ese país acabarían siendo los perjudicados por las políticas proteccionistas del multimillonario republicano.
En una entrevista con Bloomberg TV, el dueño de la gigante de telecomunicaciones América Móvil dijo que no ve ningún cambio en su estrategia empresarial ni en el valor de sus activos en Estados Unidos por la inesperada victoria de Trump, quien asumirá el cargo el 20 de enero de 2017.
"Estaría más preocupado si fuera americano", dijo Slim, quien aseguró no haber conocido personalmente a Trump.
"Si va a cerrar la economía es malo, si sale de la OTAN y otros (entes) internacionales se arriesga a perder el liderazgo de Estados Unidos en el mundo", agregó el empresario, asegurando que cualquier gravamen adicional a las importaciones acabaría siendo pagado por los consumidores estadounidenses.
Slim reconoció que el éxito del controvertido constructor neoyorquino y estrella televisiva sería bueno para México y dijo que algunas de sus propuestas le gustan, como el esquema de asociación público-privado para infraestructura.
"Eso es fantástico para México", dijo antes en un evento de Bloomberg al referirse a las promesas de Trump de disparar la tasa de crecimiento y crear millones de puestos de trabajo.
Slim, quien llegó a decir antes de la elección que los planes de Trump podrían "destruir" le economía estadounidense, advirtió que cualquier decisión contra el libre comercio entre ambos países acabará repercutiendo en los estadounidenses.
"Poner una tasa del 35 por ciento a nuestras exportaciones será pagado por los consumidores (estadounidenses)", agregó en su intervención, acompañado de otros panelistas como el ex alcalde de Nueva York Michael Bloomberg.
Trump ha criticado a las empresas estadounidenses que invierten en México y amenazó con renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) que ambos países comparten con Canadá, así como construir un muro en la frontera sur para alejar a los migrantes, lo que ha impactado en la cotización del peso mexicano.
El ejecutivo mexicano también recomendó a su Gobierno que preste atención a sus asuntos domésticos y utilice la inversión para hacer crecer a la segunda mayor economía de Latinoamérica.
Sin embargo, el hombre más rico de México y uno de los más acaudalados del planeta, aseguró que "nunca" se lanzará a la presidencia de su país y consideró que la corrupción debería ser uno de los temas clave en la campaña electoral de 2018 para elegir al sucesor de Enrique Peña Nieto.
En octubre, Trump acusó a Slim, principal accionista de The New York Times Co, de intentar ayudar a la candidata demócrata Hillary Clinton, aunque las acciones del mexicano tienen unos derechos de voto limitados.
En el plano empresarial, Slim dijo que su competidor estadounidense AT&T se está volviendo "muy agresivo" en México y que están perdiendo "un montón de dinero", por lo que le sorprende que esté vendiendo a precios muy inferiores a los de su mercado de origen.
"No están tomando mucha (cuota) de mercado. Están subsidiando demasiado los terminales (celulares)(...), pero mientras sea bueno para los clientes, nosotros felices", comentó.
Slim añadió que el recientemente fallecido líder cubano Fidel Castro, a quien conoció personalmente, "perdió la oportunidad de cambiar a Cuba" tras la caída de la Unión Soviética.