"Nunca realmente salimos de la última recesión", dijo el co-fundador del Carlyle Group, David Rubenstein, en un desayuno que también incluía al presidente ejecutivo de Blackstone Group, Stephen Schwarzman, quien agregó: "la incertidumbre general ha básicamente congelado a la economía".
Nueva York. Los directores de dos de las empresas de capital privado más poderosas del mundo emitieron este miércoles un nefasto panorama sobre la economía de Estados Unidos, indicando problemas para los líderes políticos y la capacidad de sus propias empresas para obtener ganancias.
"Nunca realmente salimos de la última recesión", dijo el co-fundador del Carlyle Group, David Rubenstein, en un desayuno en el Lincoln Centre que también incluía al presidente ejecutivo de Blackstone Group, Stephen Schwarzman.
"Pasarán unos cuantos años más antes de que consigamos que el desempleo alcance un nivel que sea tolerable", dijo Rubenstein.
Los dos ejecutivos supervisan fondos con valores de cientos de compañías globalmente, lo que les entrega una aguda visión sobre el estado de las economías locales.
La prolongada recesión ha dañado la estrategia de las empresas de capital privado, que compran compañías baratas con la esperanza de venderlas a mayor precio o lanzarlas a la bolsa con una robusta ganancia en un plazo de tres a cinco años.
Si bien la recesión de Estados Unidos oficialmente finalizó en junio del 2009, la producción económica de la nación ajustada por la inflación cayó el trimestre pasado a su nivel más bajo desde el cuarto trimestre del 2007 cuando comenzó oficialmente la recesión.
El desempleo se ha quedado estancado por encima de 9% en Estados Unidos y los economistas dicen que la lectura está más cerca de 16%, cuando el cálculo incluye a los trabajadores "subempleados" con dedicación parcial y a aquéllos que abandonaron la búsqueda de empleos.
"El venenoso diálogo político y los ataques sobre las empresas (han) llevado a la gente a ser predeciblemente muy cautelosa, a no invertir, y no querer contratar", dijo Schwarzman. "La incertidumbre general ha básicamente congelado a la economía", disparó.
Los dos gigantes de la industria del capital privado culparon a la inacción política en Washington por el estado de la economía.