El organismo pidió a la región definir su estrategia ante la demanda de productos del país asiático.
Ciudad de México, Reuters. Latinoamérica deberá definir estrategias claras si quiere fortalecer sus lazos comerciales con China y aumentar sus exportaciones ante el cambio del gigante asiático a un modelo económico que necesitará bienes de consumo además de materias primas, dijo la Cepal.
La Comisión Económica para América Latina está haciendo esfuerzos por fortalecer ese vínculo entre la región y China, el segundo comprador de productos latinoamericanos detrás de Estados Unidos, con la meta de alentar las exportaciones y achicar el déficit de la balanza comercial.
Con su insaciable apetito por materias primas, China se ha convertido en uno de los principales socios comerciales de la región en la última década, y en el mayor para economías como Brasil o Chile, que se han expandido gracias a su demanda.
Estados Unidos sigue siendo el destino más importante de las exportaciones de la región con el 40% de los envíos, y China aparece lejos con 9%. Pero el comercio latinoamericano con Beijing ha sido el que más ha crecido en los últimos años.
Mientras China publicó hace cuatro años un "libro blanco" con las directrices de la relación diplomática y comercial que busca con la región, al otro lado del mar las cosas no están tan avanzadas.
"América Latina tiene que hacer la tarea para poder ser más estratégica", dijo la secretaria ejecutiva de Cepal, Alicia Bárcena, subrayando que China está cambiando su modelo hacia una economía impulsada más por el consumo interno que por el gasto en infraestructura.
"Nuestros países tienen que estudiar con cuidado cuál debería ser el mejor perfil exportador que podemos diseñar bajo la tónica de lo que está intentando China", agregó.
La potencia asiática tiene acuerdos de libre comercio con Chile, Perú y Costa Rica, pero a Pekín no le queda claro si el resto de la región quiere seguir siendo exportadora de productos primarios, si busca subir en la escala de valor de materias primas o diversificar su estructura productiva.
China compra mayoritariamente minerales, hidrocarburos y granos a Latinoamérica. Un 83% del monto total enviado de la región a China son productos como soja, hierro, cobre y petróleo, o manufacturas basadas en recursos naturales como aceite de soja o cuero, según Cepal.
Eso ha despertado la preocupación en algunos especialistas por la dependencia de las economías regionales a los volátiles precios de las materias primas.
"Sin lugar a dudas yo creo que los 'commodities' (materias primas) seguirán siendo muy importantes y creo nuestra región seguirá siendo central para China, pero creo que hay otras áreas de oportunidad también", sostuvo Bárcena, citando por ejemplo la industria de energía renovable. "Pero para ello es necesario que haya plataformas de mejor conocimiento entre ambos países".
Nichos de oportunidad
La balanza comercial entre Latinoamérica y China -uno de los principales motores de la economía mundial- ronda los US$250.000 millones anuales, con US$100.000 millones exportados y US$150.000 millones importados por la región.
Cuando el primer ministro chino, Wen Jiabao, visitó este año la sede de Cepal en Chile dijo que su país busca aumentar el comercio con la región a US$400.000 millones anuales.
Además anunció la creación de un fondo de cooperación de US$5.000 millones y de otro fondo de inversión de US$10.000 millones, junto con una iniciativa para crear una reserva alimentaria de 500,000 toneladas.
Por eso Bárcena cree que todavía hay mucho potencial de negocios e inversiones cuando se mira al oriente.
"Hay empresas nuestras que pueden ir allá, invertir, tener una gran profundidad en el mercado de ellos, (...) hay montones de cosas que nosotros deberíamos analizar", dijo.
Cuando se reunió la semana pasada en Pekín con funcionarios, académicos y hombres de negocios, la jefa de CEPAL propuso organizar encuentros subregionales con expertos y organismos exportadores gubernamentales previos a la cumbre empresarial China-Latinoamérica del año próximo en Costa Rica.
Por lo pronto, la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) -un bloque creado el año pasado en Caracas e integrado por 33 países- ha enviado a China a los cancilleres de su troika formada por Cuba, Venezuela y Chile. Y para el próximo año están organizando una reunión de ministros de Agricultura latinoamericanos con su contraparte de Pekín.
CEPAL va a proporcionar estudios y documentos estadísticos para apoyar las discusiones en el encuentro.
Junto con la Asociación Latinoamericana de Integración (Aladi) y el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), la Cepal creó un observatorio América Latina-Asia Pacífico para poner al día la información estadística de comercio, inversiones, cooperación y acuerdos.
"Puede facilitarse mucho un diálogo más regional, en donde se vayan creando plataformas de comercio entre varios países con respecto a China, porque lógicamente la negociación país por país a veces es compleja", dijo Bárcena.