Sheng dijo que el crecimiento económico de China en el tercer trimestre no se desviaría mucho del ritmo anual de 7 por ciento que Pekín reportó para el segundo trimestre.
El crecimiento económico de China se mantendrá estable en el tercer trimestre porque el impacto del hundimiento del mercado de acciones será limitado, señaló el viernes la Oficina Nacional de Estadísticas.
Sheng Laiyun, portavoz del servicio, defendió además la exactitud de los datos chinos -en medio de un extendido escepticismo-, diciendo que el ritmo de crecimiento de 7% que se reportó para el primer semestre estaba "en general en línea" con los cambios en el consumo de energía del país, transporte por tren y crédito bancario del período.
Sheng dijo que el crecimiento económico de China en el tercer trimestre no se desviaría mucho del ritmo anual de 7 por ciento que Pekín reportó para el segundo trimestre.
"A juzgar por los indicadores en julio y agosto, sentimos que la tendencia económica sigue siendo estable, podría haber alguna desviación, al alza o a la baja, pero no será grande", dijo Sheng durante una sesión informativa.
Una serie de datos pesimistas, incluyendo producción industrial y de inversión, mostraron que la economía ha perdido más impulso en el tercer trimestre.
Sheng dijo que su "opinión personal" era de que el crecimiento del año completo estaría entre un 6,5% y un 7,5%.
Los inversores y encargados de las políticas de todo el mundo están indecisos acerca de China luego de que la Reserva Federal estadounidense mantuvo estables sus tasas de interés en su reunión de la semana pasada.
La Fed dijo que no tenía seguridad si los problemas internacionales, en particular la desaceleración en China, afectarán la recuperación de Estados Unidos.
Según Sheng, una subida en las tasas de interés en Estados Unidos tendrá un impacto limitado sobre China.
El funcionario dijo que la desaceleración económica de China se debía en parte a una demanda global más lenta y que las expectativas del despegue de las tasas en Estados Unidos han contribuido a la volatilidad de los mercados financieros globales.
"Estados Unidos no deberían exagerar el impacto de la desaceleración del crecimiento de China sobre la economía global", afirmó Sheng.