El 24 de junio, el país mediterráneo se convirtió en el quinto país de la zona euro en solicitar un rescate financiero de los fondos de apoyo de la Unión Europea.
Nicosia. Chipre dijo este miércoles que esperaba terminar las conversaciones sobre ayuda financiera con sus pares de la Unión Europea durante las próximas tres semanas, exhortando a sus futuros acreedores a ser indulgentes con el país, luego de la experiencia vivida con el rescate de Grecia.
El 24 de junio, el país mediterráneo se convirtió en el quinto país de la zona euro en solicitar un rescate financiero de los fondos de apoyo de la Unión Europea, víctima de una crisis de deuda que ha asediado y amenaza con ahogar al continente.
Los problemas financieros inmediatos de Chipre provienen de la fuerte exposición de su gigantesco sector bancario a la endeudada Grecia. El costo de rescate sólo para la banca podría ser de 10.000 millones de euros, reportó el periódico Phileleftheros de Chipre.
Tecnócratas de la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional, conocidos como la "troika", comenzaron a evaluar la economía de Chipre el martes.
Vista con profundas sospechas por parte del público chipriota debido a la dolorosa experiencia de Grecia, funcionarios de Chipre le recordaron rápidamente a la troika el miércoles que debían ser conscientes de las sensibilidades locales en cualquier recomendación que produzcan.
"Los problemas de Chipre están enfocados principalmente en el sector bancario y es donde están poniendo un énfasis particular", dijo el ministro de Finanzas Vassos Shiarly, quien se reunió con funcionarios de la llamada "troika" el miércoles.
No quiso especular respecto a ningún monto de rescate y dijo que no se han discutido cifras.
La cifra de 10.000 millones fijada por el periódico está en línea con las estimaciones iniciales del costo total de rescatar la economía de la isla. De ser confirmada, remecería incluso a las estimaciones pesimistas de cuánto efectivo necesitarían los bancos.
También presentaría problemas de sostenibilidad de la deuda, ya que la producción económica anual de Chipre se encuentra en apenas 17.300 millones de euros de PIB.
El Banco Central no quiso hacer comentarios y declaró que cualquier cifra aparecida en la prensa es "especulación pura".
Los dos mayores bancos de Chipre presentaron importantes pérdidas a causa del recorte en el valor de sus tenencias de deuda soberana griega, asumiendo un golpe de 4.000 millones de euros.
El equipo de unos 30 economistas de la troika terminarán su misión investigadora el viernes y volverán en algún cerca del 16 de julio con recomendaciones. El objetivo era terminar las negociaciones este mes, dijo Shiarly.
Chipre, expulsado de los mercados de capital internacional a causa de rendimientos de dos dígitos sobre la deuda que opera durante los últimos 14 meses, no quiso pedir antes ayuda a sus socios de la UE y a fines del año pasado asumió un préstamo bilateral de 2.500 millones con Rusia.