Lagarde fue recibida por el primer subdirector gerente, John Lipsky, el presidente del directorio de países miembros del fondo, Shakour Shaalan, y decenas de cámaras de televisión.
Washington. Christine Lagarde asumió este martes como directora gerente del FMI con unas reglas éticas más severas que su antecesor, ya que el organismo multilateral parece vacunarse de eventuales golpes a su reputación tras la escandalosa renuncia de Dominique Strauss-Kahn.
Las condiciones de su contrato se hicieron públicos luego de que la ex ministra francesa llegara a la sede del Fondo Monetario Internacional en Washington, donde se esperaba que se reuniera con los jefes de departamento, el personal y el directorio.
Lagarde fue recibida por el primer subdirector gerente, John Lipsky, el presidente del directorio de países miembros del fondo, Shakour Shaalan, y decenas de cámaras de televisión.
"El contrato hace más explícito los estándares más elevados de comportamiento ético", dijo el portavoz del FMI William Murray a Reuters.
El lenguaje del contrato se extrae de las nuevas normas de conducta del personal publicadas por el FMI en mayo.
Estas normas fueron dadas a conocer en respuesta a un escándalo del 2008 cuando el entonces jefe del FMI Strauss-Kahn tuvo un romance con una economista del fondo. Strauss-Kahn fue exculpado por el directorio de las acusaciones de acoso y abuso de poder, aunque tuvo que disculparse por un "error de juicio".
Strauss-Kahn renunció el 18 de mayo para enfrentar cargos de ataque sexual a una mucama de un hotel.
Fuentes cercanas al caso dijeron que los fiscales ahora tenían dudas sobre la credibilidad de la mujer como testigo, lo que supondría que el caso podría ser retirado.
El contrato de Lagarde la obliga a "los más altos estándares de conducta ética consistentes con los valores de la integridad, imparcialidad y discreción".
También la obliga a evitar "incluso la apariencia de incorrección".
Además, establece que "en el desempeño de sus funciones como directora gerente, tiene un deber exclusivo de lealtad al fondo y debe evitar cualquier conflicto de interés o la apariencia de ese conflicto".
También es nueva la obligación de que participe en un programa de capacitación de ética que está dirigido a todo el personal del FMI.
El contrato también le prohíbe participar en reuniones de partidos políticos con carácter personal o simpatizar con actividad política partidista, una señal de la disconformidad del directorio del FMI con los reportes de que Strauss-Kahn participó en reuniones del Partido Socialista francés cuando era director gerente.
Sin embargo, ella podría ser militante de un partido político y contribuir con fondos a una candidatura.
El contrato de Strauss-Kahn sobre ética solo establecía que él "debe observar los patrones de conducta aplicables a los miembros del personal (...) y debe evitar todo conflicto de interés, o la apariencia de tal conflicto".
Lagarde ganará US$467.940 al año, libres de impuestos, más una asignación de US$84.000 dólares, según su contrato publicado este martes.
El fondo también cubrirá sus gastos y le dará el plan de pensión y retiro del personal.
Strauss-Kahn ganaba US$421.000 anuales, con una asignación de US$75.350 al año, cuando asumió como jefe del fondo a fines del 2007.