El grupo de derechos humanos calificó como una "piñata de impunidad" el acuerdo que el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC)firmaron en La Habana a mediados de diciembre.
Colombia dijo este jueves que el acuerdo sobre justicia firmado con la guerrilla de las FARC es el mejor que se ha negociado en ese complejo tema en la historia de resolución de conflictos, aunque reconoció que no es perfecto, respondiendo a las críticas realizadas por la organización Human Rights Watch.
El grupo de derechos humanos calificó como una "piñata de impunidad" el acuerdo que el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC)firmaron en La Habana a mediados de diciembre.
El pacto establece que los integrantes de la guerrilla, los efectivos de las Fuerzas Militares y hasta civiles que acepten responsabilidades en delitos cometidos en medio del conflicto y confiesen la verdad podrán recibir una sanción de entre cinco y ocho años de restricción efectiva de la libertad, pero no cárcel.
Para el director ejecutivo para las Américas de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, el pacto permitirá que los responsables puedan eludir cualquier tipo de castigo genuino.
"Este acuerdo al que llegamos no es un acuerdo perfecto, porque ningún acuerdo de paz en la historia ha sido perfecto (...) pero lo que sí no cabe duda es que es el mejor acuerdo de justicia transicional que jamás se haya negociado", dijo Santos en una declaración desde la ciudad de Cartagena, en el Caribe colombiano.
Al término de un encuentro con los miembros del equipo de negociación del Gobierno, el mandatario dijo que expertos y organizaciones como Naciones Unidas así lo han reconocido.
Santos insistió en concluir la negociación de paz con las FARC el próximo 23 de marzo y poner fin al violento conflicto de cinco décadas con el grupo rebelde, que ha dejado alrededor de 220.000 muertos.
El mandatario anunció que a partir de la próxima semana, la negociación se mantendrá en forma permanente. Actualmente las partes buscan un acuerdo sobre el cese bilateral y definitivo al fuego y deben definir un mecanismo de refrendación de los pactos por parte de los ciudadanos.
"Lo que vamos a tratar de poner en marcha es una sesión permanente en la cual no nos levantaremos ojalá sino hasta que lleguemos a final de este proceso y hayamos acordado todos los puntos que todavía faltan por resolver", concluyó.
