Algunos de los artículos de la reforma irán la próxima semana a una conciliación entre los legisladores de la Cámara baja y el Senado, antes de pasar a sanción presidencial para que entre en vigencia a partir del primero de enero.
El Congreso de Colombia aprobó este viernes de manera definitiva un proyecto de ley de reforma tributaria con el que el Gobierno elevará la recaudación fiscal, clave para ajustar las apretadas finanzas del país y mantener las calificaciones crediticias de las agencias evaluadoras de riesgo.
Algunos de los artículos de la reforma irán la próxima semana a una conciliación entre los legisladores de la Cámara baja y el Senado, antes de pasar a sanción presidencial para que entre en vigencia a partir del primero de enero.
La reforma aumentará el recaudo en unos 6,2 billones de pesos (US$2.074 millones) en el 2017 y se incrementará en los años siguientes hasta adicionar unos 24,1 billones de pesos en el 2022.
El proyecto aprobado, que sufrió varias modificaciones desde la propuesta inicial, contempla un aumento del Impuesto al Valor Agregado (IVA) a un 19% desde el 16 por ciento actual, así como un gravamen a los dividendos dependiendo del monto que reciban las personas por parte de las empresas.
En tanto, disminuye la carga tributaria a las empresas con una reducción del impuesto de renta desde el actual 43% a un 40% en el 2017, a 37% en el 2018 y a 33 por ciento a partir del 2019, en busca de estimular la inversión y la generación de empleo.
Además, se penalizará en forma más estricta la evasión de impuestos.
"Esta es la primera reforma desde hace muchos años que es estructural (...) se está haciendo una reforma pensando en los siguientes gobiernos, no en el corto plazo. Esto nos va a ayudar desde ya a que Colombia conserve su calificación", dijo a periodistas el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas.
La reforma tributaria es clave para cumplir con una regla fiscal que establece una meta de déficit del gobierno nacional central de 3,3% del PIB para el 2017, desde uno previsto para este año de 3,9% del PIB.
Además, se produce en momentos en que el Gobierno requiere ingresos adicionales para financiar el periodo posterior a la firma de un acuerdo de paz con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Antes de la aprobación de la reforma el Gobierno proyectaba una recaudación de impuestos de 126,9 billones de pesos el próximo año (US$42.453 millones).
