El sondeo de julio refleja también que el mercado espera que la economía avance un 2,51% en 2016, lo que se compara con una expectativa de un 2,70% del mes pasado.
El mercado uruguayo ajustó a la baja sus expectativas de crecimiento económico a un 2,76% para 2015 y subió las de inflación anual a un 8,65%, en un contexto de un enfriamiento de la actividad del país sudamericano ante la crisis regional, según un sondeo del banco central.
Los analistas habían sido más optimistas en junio con un pronóstico de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de un 2,85%.
El sondeo de julio refleja también que el mercado espera que la economía avance un 2,51% en 2016, lo que se compara con una expectativa de un 2,70% del mes pasado.
Las previsiones están, no obstante, en línea con las estimaciones del Gobierno, que aguarda para este año una expansión de la actividad económica de entre un 2,5% y un 2,8%.
En el primer trimestre del año el PIB de Uruguay creció un 4% interanual y un 0,6% respecto a octubre-diciembre de 2014.
Los precios minoristas del país sudamericano avanzarían un 0,85% en julio, según el documento del banco central.
La previsión de los especialistas sobre la tasa anual de inflación es, sin embargo, superior al techo del rango meta oficial de un 7%.
Para el próximo año, los analistas consultados proyectan una inflación de un 8,18%, lo que se compara con el 7,95% que anticipaban en junio.
Uruguay, un país agrícola y ganadero, está siendo afectado por la situación económica que viven sus vecinos y principales clientes, Brasil y Argentina.