El primer ministro, Alexis Tsipras, tiene hasta este miércoles por la noche para que el Parlamento adopte dichas medidas.
El gobierno griego remitió el martes al Parlamento una ley a petición de sus acreedores internacionales para iniciar las conversaciones sobre un multimillonario paquete de rescate.
El primer ministro, Alexis Tsipras, tiene hasta este miércoles por la noche para que el Parlamento adopte dichas medidas. El primer paquete de reformas desató una rebelión en su partido la semana pasada y sólo fue aprobado gracias a los votos de partidos de oposición.
La segunda ley, aunque menos polémica, seguirá poniendo a prueba su debilitada mayoría.
Incorpora a la legislación griega las normas de la Unión Europea sobre apoyo a los bancos quebrados, aprobadas tras la crisis financiera del 2008 y destinadas a blindar a los contribuyentes del riesgo de tener que rescatar a entidades en problemas.
La denominada directiva de recuperación y resolución bancaria impone las pérdidas a los accionistas y acreedores de los bancos en problemas, antes de que se recurra a dinero de los contribuyentes para rescatar los bancos.
La Comisión Europea a finales de mayo dio a Italia, Francia y otros nueves países de la UE dos meses para adoptar la norma, que tenía que haberse comenzado a aplicar a finales del 2014, o hacer frente a acciones legales.
La normativa de rescate también incluye la adopción de nuevas normas para el sistema de justicia del país, con el objetivo de acelerar los largos procesos judiciales y recortar costos.
Junto con sus socios de coalición del Partido Griegos Independientes, de derecha, Tsipras controla 162 escaños en la asamblea de 300 representantes. Pero la rebelión de la semana pasada redujo su apoyo a sólo 123 votos, lo que implica que probablemente vuelva a necesitar a la oposición.
Grecia volvió a abrir sus bancos el lunes y devolvió miles de millones de euros que debía al Fondo Monetario Internacional y el Banco Central Europeo en los primeros indicios de una vuelta a la normalidad después de alcanzar un acuerdo a cambio de reformas con otros países de la zona euro.